Los líderes vecinales de El Llano defienden el proyecto planteado por el Ayuntamiento frente a las versiones de grupos ecologistas que les atribuían una intención de talar árboles en la plaza «de la que nunca se habló»
Para los vecinos cercanos al parque de Electra, lo que ha ocurrido en los últimos meses ha sido fruto de un «malentendido» por parte de los grupos que se oponían a su reforma. Tras una reunión entre el área de Medio Ambiente y las dos asociaciones vecinales que operan en El Llano, el Ayuntamiento se ha convencido de seguir hacia adelante con el proyecto que tenían pensado para mejorar el estado de inseguridad, deterioro y falta de luz en el recinto, tras los titubeos por la oposición de una «pseudoplataforma» ecologista que se negaba a lo que consideraron una «tala masiva» de los árboles para la obra.
Así denomina a la agrupación de algunos ciudadanos de Gijón y «algún vecino de la zona» Arancha Sánchez, presidenta en La Serena. En su caso, conoce alguno de los opositores a los cambios en la plaza, pero subraya el hecho de que no exista un grupo constituido como tal ni «ninguna plataforma registrada en el Ayuntamiento». Sánchez celebra que desde el Consistorio hayan escuchado la aprobación de ambas entidades para llevar a cabo los tan necesarios cambios en una plaza que «lleva 30 años sin tocarse» y que tiene un problema «prioritario» de seguridad. Hasta ahora, si ocurría algún accidente en alguna de las viviendas por la zona de la calle Electra, los efectivos de bomberos no habrían podido intervenir por la falta de accesibilidad que genera el arbolado a las grúas y camiones, al igual que los traslados en ambulancia, «que tienen que quedarse aparcadas en Pérez de Ayala» y recorrer bastantes metros hasta los edificios. Aparte, deja claro que «desde el Ayuntamiento nunca se habló de talar árboles».
Ángel Ramos, al frente de la AA.VV. Fumeru hace hincapié en el grado de detalle a nivel casi clínico de los estudios realizados por el los técnicos del Ayuntamiento para averiguar el estado de salud de cada árbol y que con ello la tala de un ejemplar fuese la última opción. Con las cuestiones relativas a la seguridad mantiene la misma visión. «A la reunión acudió el jefe del Servicio de Bomberos a explicarnos todos los motivos por los que un camión no podría operar adecuadamente en caso de emergencia en las plantas bajas de algunos edificios en Electra debido al tamaño de los árboles», zanja. Por eso recibió con la misma sorpresa que su compañera de La Serena la noticia de que las personas contrarias a los cambios en la plaza volvían a estar en contra de ellos, ya que «después de la reunión en el centro municipal todos salimos convencidos» de su necesidad y de que «no iba a haber ninguna tala».
Sin embargo, lo que los representantes vecinales interpretan como un error de interpretación en los planes del Ayuntamiento y las informaciones publicadas esos días, encendió tanto los ánimos entre la agrupación, que desembocó en que algunos profiriesen amenazas por teléfono al concejal de Medio Ambiente Rodrigo Pintueles así como a la empresa adjudicataria del proyecto. Ello se sumó a una campaña de buzoneo y cartelería en las calles de la zona que ha seguido en marcha hasta hace poco, a pesar de que ambos líderes del barrio recalcan que la intención del Ayuntamiento será la de «talar solo aquellos árboles enfermos o dañados» y trasplantar a otros puntos del parque a aquellos que estorben donde están.
El caso es que «por fin», las obras empezarán en cualquier momento durante los próximos días con un presupuesto cercano a los 190.000 euros. Habrá modificaciones de casi todos los elementos del parque. Se crearán zonas más soleadas para evitar el ensombrecimiento en el que ahora se encuentra sumido todo el espacio a partir de reubicar dichos árboles, aunque ello no mermará la cantidad de zonas verdes. De hecho estas se incrementarán en la zona más delantera de la plaza hacia Pérez de Ayala, algo compatible con la eliminación de las jardineras paralelas a los edificios privados de acceso ante posibles emergencias en la actualidad. Las zonas estanciales con asientos y juegos biosaludables se cambiarán por unos nuevos y se trasladarán a la futura zona con más luz, y el pavimento también se cambiará por suelo de hormigón pulido para facilitar el paseo de los mayores, además del paso de «carritos de la compra, carricoches o patinetes de los niños… Y para que ganemos todos en general», concluye Arancha.
Ojalá, la plataforma salvar el parque Electra tuviera el teléfono de Pintueles!
Está claro que tuvieron miedo y si a esto sumamos la ignorancia sobre la importancia arbolado para defenderse se dicen mentiras.
Deberían de agradecernos que gracias a la plataforma a salvar al parque Electra se pidieron informes técnicos y ahora se habla de informes técnicos.
Nosotros no perdimos , ni perderemos el tiempo degradado a vecinos o asociación de vecinos
Por cierto por cierto en todas las ciudades en toda España hay plataformas no constituidas ni registradas en los ayuntamientos que trabaja por el bien de todos los ciudadanos y ciudadanos y Gijón tiene muchas y potentes, sino que debieran caminar unidas o apoyarse.