La detención pudo efectuarse tras la denuncia de uno de los afectados, quien explicó que, además, entregó 5.000 euros al empresario para formalizar su regularización en España, algo que nunca sucedió
Agentes de la Policía Nacional, en colaboración con la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, detuvieron el pasado 9 de octubre a un empresario de origen marroquí y con nacionalidad española, acusado de explotar laboralmente a varios trabajadores. La detención tuvo lugar en el marco de una investigación que comenzó en junio de 2024 tras la denuncia de uno de los empleados afectados. El denunciante, un ciudadano marroquí en situación irregular, reveló que el empresario le había prometido regularizar su estatus laboral a cambio del pago de 5.000 euros. Sin embargo, la investigación reveló que la promesa no fue cumplida y que no era un caso aislado. Otros trabajadores de la misma empresa también se encontraban en una situación similar, trabajando sin contrato y bajo condiciones laborales precarias.
Los empleados, contratados mayoritariamente para labores de tala de árboles y desbroce de montes, realizaban jornadas de más de 12 horas diarias, los siete días de la semana. Según la información proporcionada por la Policía, el equipo de protección proporcionado era mínimo, limitado a una simple visera facial, y los trabajadores no contaban con formación en prevención de riesgos laborales, a pesar de manejar maquinaria peligrosa como desbrozadoras y motosierras. El salario que percibían estos empleados rondaba los 700 euros mensuales, pagados en efectivo, una cantidad muy inferior a la normativa vigente en el sector. Las autoridades continúan investigando el alcance de esta red de explotación laboral y no se descartan nuevas detenciones en el marco de esta operación