Han abordado temas como la vivienda, el debate sobre la universidad privada o la EBAU, en un formato cercano y dinámico

Nuevas Generaciones del Partido Popular de Gijón puso en marcha hace unos meses una iniciativa innovadora en el ámbito de la comunicación local: un podcast titulado «30′ con NNGG», que ya suma seis episodios en Spotify y sigue creciendo. La idea, según explica su presidente local, Carlos Álvarez, nació del deseo de modernizar la manera en que la organización se conecta tanto con sus afiliados como con la sociedad.
“La idea del podcast surgió en un afán de innovar a nivel de comunicación dentro de la organización”, asegura Álvarez. Hasta hace poco, los jóvenes del PP gijonés organizaban debates mensuales sobre temas de actualidad, pero el hallazgo del Centro de Iniciativas Juveniles de La Calzada cambió el rumbo. “Descubrimos una sala con micros y mesa de control, y vimos que podía salir un contenido de calidad. Desde aquí, nuestro agradecimiento al CIG por facilitar ese espacio”, añade.
«30 Minutos con NNGG» aborda temas candentes desde una óptica joven y comprometida. El último episodio, por ejemplo, trató la situación geopolítica global, la posición de la Unión Europea frente a figuras como Trump o Putin, y las implicaciones que todo ello puede tener para Asturias. “Lo enlazamos con la tradición armamentista de la región, con fábricas como las de Trubia o La Vega”, señala Álvarez.
Otros episodios han abordado temas como la vivienda, el debate sobre la universidad privada, o la EBAU en un formato cercano y dinámico. Los programas se graban cada dos o tres semanas, con un equipo en parte fijo pero abierto a nuevas incorporaciones. “Algunos compañeros ya tienen un pequeño calado entre la audiencia. La gente quiere que estén”, comenta Álvarez.
El propio presidente actúa como moderador en cada entrega. “Intento marcar los tiempos, pero también se improvisa mucho. Eso lo hace más natural”, explica. Más allá del entretenimiento, Álvarez considera que el podcast refuerza el vínculo con la militancia: “Motiva al afiliado y demuestra que comunicación y política van de la mano. Es algo muy positivo para la organización”.