ENTREVISTA CON LUIS RODRÍGUEZ VILLAMIL, JEFE DE UROLOGÍA EN EL HOSPITAL DE CABUEÑES
Este viernes se llevará a cabo en Cabueñes la primera operación en la que participará el nuevo robot Da Vinci: «Estamos como cuando llega un juguete nuevo, llenos de ilusión»
«Esta tecnología nos equipara con los principales hospitales de nuestro entorno»
La llegada de los robots quirúrgicos ‘Da Vinci’ al Hospital de Cabueñes y al HUCA supone un gran avance en las operaciones que se llevarán a cabo en la región. La primera de ellas tendrá lugar en Gijón este viernes, y será dirigida por parte del equipo de Urología de Cabueñes. Para Luis Rodríguez Villamil, jefe del servicio, la incorporación de los robots en las cirugías es comparable a la «aparición de la dirección asistida» en la conducción.
¿Qué novedades aportarán en las cirugías estos robots?
Si hablamos de los beneficios para los pacientes, los robots mejoran la eficacia de la cirugía, lo que conlleva un mejor resultado estético, reduciendo el tamaño de las incisiones, el dolor postoperatorio y la necesidad de recibir trasfusiones.
De cara a los médicos, nos permite tener una visión tridimensional con una cámara inmersiva dentro del abdomen del paciente, que es directamente dirigida por el cirujano. Esto nos permite tener más versatilidad y libertad de movimientos: nuestra mano tiene limitaciones que la rotación 360 del robot elimina. En general, mejora la visión que en todo momento tenemos de la operación, por lo que se consigue una cirugía mucho más precisa.
¿Acortarán los tiempos de operación? ¿Ayudarán, entonces, los ‘Da Vinci’ a reducir las listas de espera?
Lo lógico es que sí, que acorten los tiempos, aunque asumimos la “curva de aprendizaje” que aparecerá durante las primeras operaciones. Como en cualquier novedad, en esta también llevará un tiempo hacerse a ella.
En cuanto a la segunda pregunta, sí, se espera que repercuta positivamente en las listas de espera. No es su objetivo, pero es una consecuencia que probablemente suceda.
Durante esta semana el personal del hospital ha estado formándose con los robots. ¿Cómo están siendo las sensaciones?
Muy buenas. La gente está muy ilusionada, la consola del robot aporta mucha información, te ayuda a completar esos movimientos que quieres hacer. Y no sólo es un avance para los cirujanos, también para enfermeras o anestesistas presenta ventajas. Estamos como cuando llega un juguete nuevo, llenos de ilusión.
Los hospitales de León o Valencia ya cuentan con esta tecnología desde hace tiempo. ¿Llega tarde al Principado?
Es cierto que, por ejemplo, con respecto a nuestros vecinos gallegos llevamos año y medio de retraso, y que hay otros hospitales que llevan ya 4 o 5 años con la tecnología operativa. No me atrevería a definir si ha sido tarde, pero nos hubiera venido bien antes, claro. Es una tecnología que nos equipara con los principales hospitales de nuestro entorno.
La primera operación, este viernes, la llevará a cabo parte del equipo de Urología. Después tocará el turno de la formación a Cirugía General, Ginecología…
Ahora que el robot ya está en el hospital la formación es mucho más rápida. De hecho, calculamos que los compañeros de Cirugía terminen en pocas semanas su periodo formativo. Para nuestro equipo fue un poco más complicado, con estancias en el extranjero o visitas a otros hospitales para aprender la técnica. Ahora todo será más sencillo.
¿A qué hito se puede comparar la incorporación de estos robots al día a día de las operaciones?
Quizás a la dirección asistida en un coche: tú ya sabías conducir, pero de repente había algo que te ayudaba a girar y hacía tu conducción más segura. A nivel médico, puede que a la introducción en 2009 de la cirugía laparoscópica. Entonces se pasó de grandes incisiones a unas mucho menores con las que en 2-3 días el paciente se podía ir a casa. Espero que estos robots nos ayuden a dar ese siguiente paso.
A ver si hay periodistas de una jodía vez.
Este señor ya NO es el jefe de Servicio de Urología de Cabueñes.