Las pesquisas, fruto de dos operaciones distintas, se han centrado en la sustracción de virutas de aluminio, y de válvulas y carretes de aleación para uso industrial

La Guardia Civil ha dado por finalizadas dos operaciones en torno a la sustracción de material metálico en otras tantas empresas situadas en polígonos industriales de Gijón y de Gozón. Y, como principal resultado hasta el momento, el instituto armado está investigando a cuatro personas como presuntas implicadas en el hurto de dicho material, conformado por 154 piezas de material de aleaciones metálicas para la construcción de canalizaciones industriales, cuyo valor total ascendería a más de 93.000 euros.
A finales del mes de abril, en el transcurso de una inspección en un centro de reciclaje de materiales metálicos de Gijón, se detectó la presencia de material sospechoso de haber sido sustraído. Se trataba de 21 piezas de válvulas y carretes de aleación metálica, destinados a construir conductos para toda clase canalizaciones industriales. El hallazgo puso en alerta a los agentes, que intervinieron las piezas en cuestión, al tiempo que profundizaban en las pesquisas.
Siguiendo el rastro del material intervenido, pudieron comprobar que, efectivamente, habían sido hurtadas de una empresa sita en el polígono industrial de Bankounión II, que se dedica a la comercialización de ese tipo de material. Más aún, las investigaciones pudieron determinar que se habían sustraído un total de 145 piezas desde marzo de este mismo año, siendo un material de escaso valor de reciclaje, pero de alto valor en uso industrial, tasado en más de 22.000 euros.
Finalmente, los uniformados pudieron identificar al autor del hurto, un trabajador de la misma empresa que había sido contratado para una sustitución temporal. Según se pudo conocer, esa persona realizó un total de dieciséis operaciones de venta del material, tras ir haciendo acopio de ello en la empresa que le había contratado. Por todo ello, el pasado 3 de mayo se procedió a la toma de manifestación, en calidad de investigado, del sujeto en cuestión, un vecino de Noreña de 39 años.
Paralelamente la Guardia Civil desarrolló un operativo similar en torno a 2.080 kilos de aluminio de vanadio, recopilado por un trabajador de una empresa del polígono de Maqua-Gozón entre octubre a diciembre de 2022. En su caso, la empresa donde trabajaba se dio cuenta en enero, al realizar un inventario, de la falta de 2.080 kilos de aluminio, que utilizan para fabricar piezas de aleación. Tras recibir la denuncia de los hechos, la Benemérita estableció un círculo de posibles sospechosos, cuyo punto de origen era la propia empresa.
El material sustraído, en forma de virutas, hacía pensar a los investigadores que se trataba de un trabajador de la misma. Las investigaciones dieron sus frutos al detectar la venta de parte del aluminio en un establecimiento de reciclaje de material metálico en Avilés. Esa operación se hizo a través de una empresa que, posteriormente, se supo que era propiedad de los padres de uno de los empleados.
De esta manera, la operación se saldó con la toma de manifestación, en calidad de investigados, de tres personas. Una de ellas, trabajador de la empresa donde se había sustraído el material, es un vecino de Avilés de 35 años; junto a él se investiga a sus padres, de 60 y 61 años, también vecinos de Avilés, quienes le habían dado cobertura para la venta del material sustraído, cuyo valor supera los 71.000 euros.