Teresa Sánchez Rodríguez
Me resulta inaceptable que se me ataque por opinar sobre la oficialidad del asturiano con el único argumento de que no soy nacida en Asturias, parece que los no nacidos aquí no podemos hablar de lo que no sabemos
En los últimos días se ha generado una considerable polémica en las redes sociales con motivo de uno de mis últimos artículos publicados en miGijón, en el que me posicionaba en contra de la oficialidad del Asturiano. Por parte de unos cuantos radicales se venía a decir que yo no estaba “autorizada” a opinar sobre este tema por no ser nacida en Asturias.
Efectivamente, no soy nacida en Asturias, nací en Salamanca, pero como decía con mucha gracia el actor asturiano, Alberto Rodríguez, ‘El Folixeru’: «Eso no ye culpa tuya, ye culpa de tu madre». Estoy muy orgullosa de haber nacido en Salamanca, una de las ciudades más bonitas del mundo, donde pasé los años de mi infancia, juventud y los de estudiante universitaria en la Facultad de Derecho.
Luego, hace ya más de 20 años, el destino quiso que viniese a vivir a Gijón y esta ciudad me enganchó. Los paseos por la zona del Puerto Deportivo, la Cuesta del Cholo, Cimavilla, el Cerro de Santa Catalina, la playa de San Lorenzo, el Paseo del Muro, la ruta de los vinos, la zona del Carmen, los barrios y los alrededores de Gijón, me descubrieron la ciudad con mejor calidad de vida de España (a pesar de la contaminación de la zona Oeste, que la hay), y fue todo un flechazo. Desde el primer momento esta ciudad me acogió con los brazos abiertos, porque Gijón y los gijoneses son así y siempre han sido así, generosos y solidarios, recibiendo desde hace muchas décadas a ciudadanos venidos de otras partes de Asturias y de España y logrando que todos los que hemos venido de fuera nos acabemos sintiendo orgullosos de ser gijoneses.
Aquí han nacido mis hijos y aquí he desarrollado mi carrera profesional, y por todo eso me considero suficientemente autorizada para opinar sobre cualquier tema que afecte al futuro y al bienestar de Gijón y de Asturias y por eso mismo vuelvo a manifestar mi apoyo y cariño al asturiano, y que se promocione y se fomente su uso, como parte de la Cultura e Historia de Asturias, pero mi posición es en contra de la oficialidad, de la imposición. Asturiano SI, oficialidad NO.
La “asturianía” consiste en una especial relación sentimental con esta región y se refiere tanto a los que han nacido aquí como a los que hemos nacido fuera pero tenemos aquí hecha nuestra vida, e incluso a los nacidos al otro lado del mar, hijos de la emigración, y que desde América miran con atención todo lo que pasa en su “tierrina” y la sienten como propia sin haberla pisado nunca.
Sentirse asturiano no tiene nada que ver con haber nacido aquí, es un sentimiento que se crea en el corazón de cada persona. Estoy muy orgullosa de ser asturiana de corazón, de sentir una gran emoción cuando oigo el himno de Asturias tocado por una banda de gaitas, de vibrar con las victorias del Sporting de Gijón, de ponerse los pelos de punta cuando se consigue cada verano batir el récord de escanciado simultáneo de la sidra y oigo el “Gijón del Alma”, de sentir algo muy especial cada vez que voy a la Bendición de las aguas del Mar Cantábrico, de respingarme cuando bailo la danza prima mirando al Mar el día de Begoña con el Restallón… Me encanta ser una cicerone de Gijón, enseñar y promocionar todas las “beldades” de mi ciudad. Asistir a los actos culturales y de festejos de Gijón y apoyar a los artistas de aquí, siempre.
Por todo esto, me resulta inaceptable que se me ataque por opinar sobre la oficialidad del asturiano con el único argumento de que no soy nacida en Asturias, parece que los no nacidos aquí no podemos hablar de lo que no sabemos…No podemos opinar sobre la imposición de la oficialidad de la llingua que lo único que va a generar es desigualdades en el acceso al empleo público o a la consecución de subvenciones, además de un coste innecesario para el bienestar e interés de los asturianos.
Sucede algo parecido si opinas sobre la reciente manifestación, a la entrada de la Semana Negra, de 4 “asturchales” en contra del Turismo en Asturias, al que consideran como “turismu masivu” y prefieren que no vengan turistas y visitantes a nuestra región ¿Pero se puede estar más fuera de la realidad del mundo actual? ¿Qué buscan? ¿Que Asturias sea una isla sólo para los nacidos aquí y ser una “república independiente”? No lo puedo entender.
Esta gente que, en las redes sociales, se esconden detrás de perfiles ocultando su identidad, son capaces de faltar el respeto, de coartar las opiniones de los demás, de insultar y de ordenar que no opinemos sencillamente porque no somos asturianos de cuna. Soy salmantina de nacimiento y adoro mi ciudad, Gijón, soy y me siento muy asturiana de corazón, forjado a fuego desde hace 22 años. Y siento que tengo toda la autoridad moral, libertad y responsabilidad para hablar de Asturias, de Gijón y opinar sobre todo aquello que pueda dañar, aislar o perjudicar a la tierra que me acogió con los brazos abiertos hace ya más de dos décadas.
Teresa, a mí me parece perfecto que opines en contra de la oficialidad, argumentando que quieres mucho a Gijón (poca mención al resto de Asturias, pero eh). Me parece válido y estupendo. Yo opino que las leyes deben seguirse a rajatabla y sean perseguidas por la justicia aquellas personas que, en virtud de cargo público, no cumplan la ley 1/1998 de uso y promoción del asturiano. De momento, podemos empezar por ahí: ¿trato?
Por otro lado, ¿qué problema tienes con que se denuncie un turismo masivo, no aquí, en cualquier ciudad? Está más que demostrado que el turismo masivo expulsa a los ciudadanos de su propia ciudad (a la que tanto quieres) y empobrece a la población al apostar fuertemente por modelos productivos de bajo retorno. Lloret de Mar es uno de los municipios más turísticos del país. También es el municipio más pobre de España. Yo también puedo querer turismo, pero lo quiero regulado y limitado.
Cuidado con la estrategia del asturiano oficial;mirar el espejo de Cataluña.Todos somos españoles y el idioma oficial es el español,aunque se permitan ,otras lenguas o denominaciones propias dé cada territorio,que hacen a cada región peculiar!!
Llevar 20 años aqui no te da voz ni voto en la decision sobre el asturiano. El resto nacimos aqui ,nuestros antepasados ya estaban aqui hablando esa lengua que algunos , que seguis siendo turistas de larga duracion, venis a influenciar en algo con lo que tropezasteis cuando llegasteis, como los madrileños venis aqui a que nosotros nos adaptemos a vosotros y nun ye asi güapinos, al que no le guste lo que tenemos caminito del negron y muy buens.
Yo nací aquí. Vivo en las cuencas. Esa lengua de la que hablas por dónde anda que nunca la vi? Cuando quieras te llevo a una residencia de ancianos con más de 120 residentes ASTURIANOS y si encuentras UNO que hable esa lengua regalote hasta el coche mira lo que te digo. Gente que por elección se han quedado en Asturias son más asturianos que tú y toda tu raza, zoquete.
Pues yo soy asturiana 100% y en cuanto al asturiano pienso lo mismo que Teresa… Asturiano SI Oficialidad NO… Principalmente por el coste económico que supone implantar la oficialidad… Creo que Asturias necesita ese dinero para cosas mucho más importantes que sirvan para que está región salga del vagón de cola
«Parece que los no nacidos aquí no podemos hablar de lo que no sabemos», dices. En realidad, independientemente del lugar de nacimiento, todo el mundo debería ser lo suficientemente prudente y no hablar de lo que no se sabe.
Sobre tu falta de entendimiento de la manifestación de los «cuatro asturchales» contra el «turismu masivu», puede que no entendieses el complejo significado del término «masivu», tan alejado de su equivalente en castellano: «masivo».
Por supuestu se pue opinar, pero con argumentaciones de verdá. Vivimos nun mundu d’imposiciones, entamando polos impuestos de Facienda, siguiendo pol sistema educativu (del verbu llatinu duco, guiar, llevar a dalgún sitiu) y acabando polos trabayos nos que se nos imponen regles. ¿Acasu nun te impusieren a ti la obligación de tener el títulu de Derechu pa poder exercer l’abogacía? ¿O ye que podríes facelo ensin títulu, namás que porque te presta? Y podríemos siguir por cualquier sitiu.
Ye más, aquello que nun s’impón nun ye importante, ye entretenimientu. Ún pue tener l’entretenimientu que quiera, que pa gustos nun hai colores, pero la llingua nun debería ser un entretenimientu. De fechu, nes llingües d’Estáu, por exemplu, el castellán, nun ye nengún entretenimientu. Nun se trata de que a fulanu présta-y estudiar gramática. Na escuela pasamos años aprendiento «el correcto uso del idioma» unos con más fortuna y otros con menos, pero toos pasamos perehí. Y cuando daquién va a unes oposiciones, nun fala nin escribe como-y pete, hai que lo facer «como Dios manda». ¿O acasu tu escribes los tos papeles pal xulgáu como te pete, ensin imposiciones gramaticales?
Y en cuanto a que l’asturianía ye un sentimientu, entós habrá que pidir a tol que quiera ser español que tamién nun tenga más que sentimientu. Si SER d’un sitiu ye namás qu’un sentimientu, ¿por qué motivu se pide a daquién que quiera ser español que faiga un esamen, como dicía l’otru «atención al dato», de cultura española y otru de conocimientu del idioma? Si namás ye un sentimientu, que pidan sentimientos.
Y si ye namás sentimientu, ¿por qué na escuela s’estudia «Historia y Geografía» d’España, por qué «Lengua y Literatura» castellana, etc? ¿Acasu los neños nun tienen bastante con sentimientos y con allegrase de que gane la Selección?
Como dicía Nuberu, ser asturianu nun ye dir a Cuadonga, nin saber echar la sidra, nin dir con montera picona, igual que ser español nun ye que te gusten los toros, nin comer paella nin dir al Rocío.
Sigo diciendo. ¡Vaya nivel!
«Zoquete?»
Lo primero de todo es respetar y luego opina respetuosamente.
No es nacer o no nacer, es conocer.
Usted desconoce la realidad y los términos de la Constitución y del Estatuto.
Es usted una babaya!!
Observe cómo pudiendo haberle contestado en Asturiano,le contestó en Castellano excepto al definirla.
Y lo hago porque respeto su idioma,respete usted el mío.
Al no hacerlo es usted una facha babaya.