«No hace falta cruzar el mundo para ver que los glaciares se derriten. O el problema del plástico, por ejemplo. Estuve no hace mucho en Cabo Verde y me asusté de todo aquel mar de plástico»
Flor Guardado es directora del Puerto Deportivo de Gijón desde el año 2005. Una nueva bandera azul ondea en la dársena, lo que significa que nuevamente este puerto cumple con rigurosos estándares la calidad del agua, sostenibilidad, seguridad, limpieza y servicios. De ello se ocupa esta mujer que se caracteriza por su gran capacidad de trabajo y mando de equipo.
– ¿De qué países nos visitan más?
– De Francia principalmente. Somos los vecinos y Gijón es una plaza muy interesante para los barcos. Dese cuenta que estamos en el centro de la ciudad. No tenemos competencia fuerte, en ese sentido.
– ¿Hay mucha fiesta en los pantalanes?
– No hacen fiestas. Ya hay bastante fiesta por todos los rincones de la ciudad. Los que amarran sobre todo son tránsitos y después de una travesía vienen a descansar.
– ¡Vaya! Yo que sigo esperando a que me inviten a una, o me saquen a pasear…
– Pue habrá que remediar ese punto.
– ¿Cómo?
– No puedo creer que nadie, después de haberme dicho lo mismo hace tantos años, no la haya querido llevar en barco a dar una vuelta, con lo divertida que es usted.
– Ya le digo…En fin ¿cuénteme que se puede hacer divertido en uno de estos veleros que estamos viendo?
– Se pueden hacer cosas muy divertidas. Igual para unos lo son y para otros no tanto.
– Depende del pudor…
– Mire por ejemplo queda muy guay ver un atardecer y compartir una “botellina” de sidra, que para esos estamos en Asturias. Como echar en el agua “culinos” es difícil, con una espumosa, que está muy de moda.
– Unos canapés, una tortillina…
– Yo añadiría en el picnic una “latina” de oricios, mejillones, vestresca, de nuestras conserveras…
– Y luego todos al agua.
– Eso es.
– ¡Ay no! Que igual hay tiburones…
– Rotundamente no, en estas aguas no hay tiburones.
– Por cierto, enhorabuena por la nueva bandera azul, porque es difícil mantener durante tanto tiempo esta bandera. No solo depende de ustedes, de todos los demás.
– Los requisitos cada vez son más complicados y cada año se añade alguno nuevo. Este, por ejemplo, teníamos que contar con desfibrilador. ¡Y claro! sin olvidar todo el tema medioambiental.
– Eso quería preguntarle. ¿Está convencida del cambio climático?
– La temperatura del agua cada vez sube más, no sé si unos cuatro grados en los últimos diez años. No es tanto la exactitud del dato si no que, por ejemplo, a la gente que entrevistaban en el programa donde escuché ese dato y que estaba en el Mediterráneo, decían que no se refrescaban al meterse en el agua.
– Que diría a esas personas que no creen en este problema el clima.
– Que no hace falta cruzar el mundo para ver que los glaciares se derriten. O el problema del plástico, por ejemplo. Estuve no hace mucho en Cabo Verde y me asusté de todo aquel mar de plástico. No es tanto lo que tiran al agua, es que no tienen plantas de reciclaje, no tienen para tratamientos de esos residuos. Conviven con ellos.
– ¿Y aquí?
– ¡Bueno! Hay vasos de plástico en la dársena, de siempre. Este es un problema que tenemos todos los puertos que tenemos zona nocturna al lado. O por ejemplo, el otro día fui a uno de los festivales que se organizan aquí y vi muy pocos contenedores. Donde no hay papeleras, hay basura. Eso es así aquí y en cualquier sitio.
– Vale más que sobre…
– Que no que falten, exacto. De todas formas, es un problema educacional, sin duda en todo el mundo. Hay muchos proyectos de educación y demás, pero si no se ataja desde casa, con sus padres…no hay nada que hacer.
– Que le falta por hacer en el Puerto.
– Bueno tenía muchas ganas de organizar un desfile y ya está hecho y con gran éxito. Pero ¡claro como digo yo! Por las cosas chulas y bien organizadas, hay que pagar. Eso es la economía circular.
– ¡Bueno! Sentarse en esta dársena a ver lo que sea, es un lujo, sin duda.
– Es un magnífico escenario para una sesión de cine, por ejemplo.
– ¡Divino!
-Y en estas plataformas o en otras, poner hamacas para tomar el sol. Pero hay que pensarlo mucho porque claro tendría, cómo dije antes, un coste. En fin, me gustaría que la ciudad contase con el Puerto para más cosas, no solo a jolgorios.
Pues para ser gerente del Puerto Deportivo, lo tiene muy guarro. Mejor se metía esa lengua progre en el bolsillo, antes de criticar la suciedad marítima en otras partes del mundo…