Bajo el lema ‘Acelerar el cambio’, el objetivo de esta efeméride es concienciar a la población para que lo que llega a los colectores no dañe el medio ambiente, la salud y la economía
Un año más, la Empresa Municipal de Aguas de Gijón (EMA) se une a la celebración del Día Mundial del Retrete. Y, para ello, desde el organismo público se ha elaborado un completo programa de actividades destinadas tanto a escolares como a personas mayores. Así, unos 400 estudiantes en edad escolar de diez colegios de la ciudad participarán en cuentacuentos, talleres y juegos diversos, todo ello ofrecido en el pabellón de Gijón del Recinto Ferial ‘Luis Adaro’, y relacionados con el cuidado del agua. Además, se han preparado charlas divulgativas y de concienciación, que se realizarán en seis centros de mayores de la ciudad, en distintas fechas a lo largo de este mes. Estas actividades se engloban en el programa educativo y de atención a las personas mayores de EMA, que en 2022 alcanzó a 5.475 escolares y tres centros de mayores. Por su parte, el acto institucional tendrá lugar, presumiblemente, el 17 de noviembre, dos jornadas antes de la celebración oficial del día.
Para la campaña de este año se vuelve a contar con tres personajes muy conocidos en la ciudad: Pipí, Popó y Papel, quienes, en esta ocasión, se enfrentan y, tal como detallan desde el área municipal de Medio Ambiente, «derrotan a todos esos elementos que acaban en las tuberías, producen atascos y contaminan el agua; sobre todo las toallitas, las colillas y la grasa». De hecho, una de las preocupaciones de la concejalía que encabeza Rodrigo Pintueles es que, a veces, no se relaciona al inodoro, al fregadero o a los sumideros de las calles con el saneamiento, como si fueran entidades independientes, pero no lo son. «Todo lo que tiramos al váter o al suelo acaba en nuestras redes de saneamiento, que no aguantan todo». No en vano, «los colectores y depuradoras de nuestras ciudades están diseñados para soportar y depurar aguas que contienen residuos fecales y papel higiénico. Y nada más». De ahí que, en los últimos años, el Ayuntamiento haya insistido en sus campañas en que se recuerden esas pautas, a través de sus tres personajes.
Desde la propia EMA inciden en que, pese a haberlo asumido como algo común en los hogares del mundo desarrollado, «un retrete es algo pequeño pero maravilloso, como un colibrí, que es el símbolo que Naciones Unidas ha escogido para celebrar el Día Mundial del Agua y el Día Mundial del Retrete 2023». Se trata, además, de un momento perfecto para recordar que, en la actualidad, más de 3.500 millones de personas aún no tienen acceso a retretes seguros, y 419 millones aún tienen que defecar al aire libre. En estas situaciones, la transmisión de enfermedades es una amenaza para la naturaleza y para la salud, en especial la de las mujeres, niñas y otros grupos vulnerables. «Nuestras acciones, aun las más pequeñas, ayudan a mejorar los sistemas de saneamiento y a proteger la naturaleza. La cuenta atrás para 2030 se acelera, con solo siete años para alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible número seis», que contempla el saneamiento y agua potable para todos en 2030. «A fecha de hoy, estamos muy lejos de conseguir este objetivo: necesitamos ir cinco veces más rápido que hasta ahora. El lema del Día Mundial del Retrete 2023 es ‘Acelerar el cambio’, haciéndolo todos lo mejor que podamos».