La mujer, de 90 años, apenas tiene movilidad y se sospecha que llevaría días sin medicación ni alimentos
La rápida reacción de los vecinos pudo haber salvado ayer la vida de una mujer. Y es que, ante la falta de noticias de sus vecinos, un hombre de 66 años y su madre, de 90, estos dieron la voz de alarma a la policía, que tras entrar en el domicilio de ambos, encontraron el cuerpo sin vida del hijo.
Los hechos sucedieron este viernes, en un bloque de la calle Alegría de Gijón. A expensas de realizar la autopsia al fallecido, se cree que la muerte pudo haberse producido de forma natural. El hombre llevaría varios días fallecido, días en los que, se sospecha, la mujer no pudo alimentarse ni tomar su medicación, tampoco probablemente de dar la voz de alarma de lo sucedido, ya que apenas cuenta con movilidad. Así, este viernes era trasladada a un centro hospitalario para su reconocimiento.