El restaurante gijonés acoge My Fair Wedding, un encuentro pensado para que futuras parejas de novios entablen conversación con una veintena de proveedores de servicios nupciales de origen asturiano
Cualquier pareja que se haya visto inmersa en la infinidad de detalles que giraron en torno a su boda, habría deseado tener la oportunidad de explicar al milímetro personalmente a sus proveedores cómo quería las cosas. Las mejores flores para el ramo, el tipo de música en cada momento de la celebración o los colores más favorecedores para el vestido… Hay muchos ejemplos. Y, de igual forma, para los responsables de organizar para los protagonistas “el día más importante de su vida” también supondría una gran ventaja atender a cada petición. Por eso, la impulsora de My Fair Wedding decidió hacerlo posible y crear el gran evento que tendrá lugar el domingo 3 de marzo en el restaurante Somió Park de Gijón.
En él, amor y negocios se darán cita desde las 11.00 hasta las 20.00 horas para que novios y proveedores de servicios de bodas se pongan cara y establezcan un contacto personal. Así clientes y marcas, dos partes de un mismo sector que nunca suelen hablar de forma directa, podrán conocerse de ‘tú a tú’, un tipo de acercamiento muchas veces diluido en las ferias en las que participan las empresas. Un total de 22 negocios asturianos “muy reconocidos dentro de la región” buscarán captar la atención de los novios asistentes a través de charlas, sorteos e incluso música en directo, asegura Alba Espina, la responsable del evento bajo la marca Infinity World.
“Trabajamos de manera muy estrecha con los novios, por eso termina surgiendo un vínculo casi de amistad y esa confianza provocó que nos hablasen de su proyecto de boda, sus necesidades…”, cuenta su impulsora
Alba aterrizó en el mundo de las bodas bajo el paraguas de su agencia física, Zafiro Tours Gijón Costa. Lo hizo empezando por el paso final, la luna de miel de los recién casados, ya que comenzó a darse cuenta de que los turoperadores ofrecían un servicio “muy poco personalizado” y adaptado a las necesidades de cada pareja. Ella optó por diferenciarse y crear una organización de los itinerarios en las cuales los preparativos “duran meses”, al hacer partícipes a los novios en cada decisión. “Trabajamos de manera muy estrecha con ellos, por eso siempre termina surgiendo un vínculo casi de amistad y esa confianza provocó que nos hablasen de su proyecto de boda, sus necesidades…”, relata Espina. Saber escuchar y conservar una buena cartera de clientes hizo que quisiese seguir orientando su actividad profesional a satisfacer las necesidades de los futuros matrimonios y de ahí surgieron sus dos vertientes de negocio: los viajes y los eventos para las parejas con proveedores.
Aquellos futuros enlaces que tengan fecha para 2025 y 2026, se encontrarán el domingo en Gijón con todo tipo de empresas que Alba califica como “expertas en cumplir sueños”. Marcas locales reconocidas como Migaya, Botambi o la banda de Sur a Norte conforman un abanico de servicios que van desde la artesanía, los regalos para invitados o el maquillaje y peluquería hasta la papelería, fotografía, floristería, vestidos de novia, catering, asesoría financiera, DJs, música en directo… Un largo etcétera en el que todo tiene su organización, incluso la necesidad más rocambolesca que surja, como ocurre por ejemplo con “la hora loca”. “Una de las empresas participantes más especializada se dedica a animar esa hora de la celebración en la que todo el mundo se queda un poco ‘plof’ con personas disfrazadas, bailes… Solo cumple esa tarea”, cuenta Espina.
Como participante habitual en encuentros entre proveedores del sector bodas, su creadora logró entender que algo fallaba: “Vimos que el ambiente que se crea resulta frío, acuden muchas empresas que no se conocen entre sí ni tampoco al organizador y pueden generarse incluso tiranteces, por eso en nuestro formato quisimos promover un contacto previo entre ellos”. Tiene claro, además, que My Fair Wedding ha nacido “para quedarse” y convertirse en una cita de referencia a nivel nacional, por ello planea replicarlo en Oviedo, Avilés, Madrid, León… Y allá donde le permitan sus clientes, también procedentes de puntos de España distintos al Principado, como “Coruña, Barcelona o Valencia”. Y aunque la organizadora se confiesa un poco “a ciegas” pensando en posibles previsiones de asistencia, las sensaciones de momento, conociendo a su clientela, son “muy buenas”.