La intervención, cuyo coste se elevó hasta superar los dos millones de euros, cumple con la intención del Ayuntamiento de que las áreas rurales de Gijón «tengan los mismos servicios que la zona urbana»
Misión cumplida. Con esas dos palabras bien presentes en mente, el Ayuntamiento de Gijón anunciaba ayer la finalización de las obras del saneamiento del núcleo de Robledo, en la parroquia de Caldones, ejecutadas en las últimas semanas por la Empresa Municipal de Aguas (EMA), y de las que se beneficiará medio centenar de viviendas. Una intervención con la que, según el presidente de dicha entidad local, y concejal de Urbanismo, Jesús Martínez Salvador, se cumple el compromiso de «extender la red de saneamiento por las parroquias rurales de Gijón, que deben tener los mismos servicios que la zona urbana», y que ha requerido un desembolso de más de dos millones de euros.
A efectos técnicos, se han ejecutado once colectores que recogen las aguas fecales del casi centenar de viviendas y parcelas del ámbito del proyecto, para transportarlas por gravedad hasta distintos pozos del colector de Robledo, al que ya tributan. Se trata de tres kilómetros y medio de tuberías de PVC, de diámetros de 315 y 400 milímetros, que enlazan con la red existente de la zona en dos puntos distintos. Además, se ha realizado una conducción de impulsión y una estación de bombeo. Las obras se completan con la reposición de los viales y servicios afectados; a mayores, cabe destacar el cruce de un cauce mediante la fijación de la conducción a un puente de un vial municipal.
A la licitación concurrieron en su día once empresas, cinco de cuyas ofertas fueron desechadas por encontrarse en situación de temeridad. Finalmente, fue la constructora gijonesa Alvargonzález Contratas la que ejecutó los trabajos proyectados por la ingeniera de caminos Laura Álvarez, de la firma ovetense Magna Dea. No obstante, los técnicos de la EMA hacían hincapié ayer en la colaboración de los vecinos de la parroquia, que han facilitado en gran medida los trabajos, cuestión habitual cuando se realizan obras en la zona rural. Y próximamente saldrán a licitación dos obras similares, en el barrio de Santa Cecilia, en San Martín de Huerces, y en la parroquia de Arroyo, en La Pedrera, que contarán con un presupuesto de aproximadamente tres millones de euros.