La sidrería gijonesa redobla esfuerzos desde hoy con la emisión del partido de Champions y continúa una semana de música en directo que terminará con un menú especial por el Día de la Madre
«Nos implicamos para que la gente coma muy bien, se lo pase bien y tenga el mejor ambiente sidrero, los mejores escanciadores….». Lo que describe Emilio Rubio, gerente de La Montera Picona, es el resultado del esfuerzo con el que el hostelero insufla a su equipo para hacer su trabajo lo mejor posible. El reto que diariamente se pone la sidrería gijonesa de la calle Saavedra consiste en seguir haciendo que la gente asocie conceptos como «sidra, diversión y buen comer» cuando piense en ellos, además de una cualidad única que pasa por buscar el mantenimiento de la cultura chigrera; esa que mantiene la música en directo para contagiarla hasta el último comensal en la mesa, y la misma que respeta que los culinos los escancie un profesional y no una máquina.
En dicho reto también entra el empeño por estar presente en los momentos para la alegría o la celebración de su clientela, aunque ello suponga abrir un día más a la semana como ocurre hoy. Desde este martes, La Montera Picona quiere acompañar a la gente en los días especiales que vienen, y para ello aliñarán su comida con conciertos en directo de algunas voces ya conocidas en el local. Los preliminares empiezan esta noche a partir de las 21.00 horas. Los clientes de La Montera tendrán una cita con el gran televisor del restaurante y con el fútbol, ya que la sidrería invita a todo aquel aficionado al esférico a disfrutar de la semifinal de Champions League entre el Bayern y el Real Madrid y «vivir el partido con la intensidad que se merecen» en la zona habilitada para seguir el partido, asegura el propietario. Una hora antes, a las 20.00h, el grupo Eleven hará de la previa una fiesta en el escenario.
El miércoles 1 empieza la música con una sesión de tardeo a partir de las 17.30 horas ambientada por la rumba y las guitarras de ‘De Sur a Norte’. El Día del Trabajador se convertirá «en una experiencia y una jornada para celebrar» junto al trío de artistas, aunque previamente estará «sumando diversión» al ambiente Arancha Miñán con su concierto en sesión vermut a las 13.30 horas.
El viernes 3, Aroa Peña hará vibrar a los clientes del establecimiento gijonés para poner un broche alegre a la semana que termina. Estará sobre las tablas desde las 20.00 horas. Lo mismo ocurrirá el sábado 4 a partir también de las 20.00 horas con el Grupo Fusión, aunque de todas formas, Rubio recuerda que en su sidrería hay sitio para todos. Con más de 200 asientos solo en el interior, los clientes pueden elegir el grado de «jolgorio» que buscan en cada velada a partir de los distintos ambientes que tiene el gran local, con zona de conciertos y zona de comedor «más tranquila», explica. Y es que, tal y como garantiza el empresario, «el tema de la música debe concebirse como un regalo para sumar diversión».
El fin de semana de música y arte se saldará con un menú para el domingo 5, Día de la Madre, con cocina «de mucho nivel» en su menú especial, además de la actuación de Mercedes Ben Salah desde las 13.30 horas. La zona del comedor ya está completa, pero los que se anden rápido aún están a tiempo de hacerse con alguna de las mesas en la zona de conciertos. En ella y como reitera Rubio, la alegría estará servida.
