Los vecinos de la zona oeste colgarán una lona negra que cubrirá parte de la fachada del emblemático edificio: «El Oeste no se rinde»
La lucha vecinal para pelear por un proyecto del vial de Jove que contemple su soterramiento continúa. Al nutrido calendario de concentraciones organizadas por la Federación de Asociaciones Vecinales (FAV) y la Plataforma Contra la Contaminación de Xixón (PCCX) suman ahora un nuevo gesto con que los vecinos de la zona buscan diversificar los esfuerzos de apoyo por parte de la ciudadanía y «dar con formas de protesta que no siempre impliquen disponer de una mañana o una tarde para asistir a una marcha», explica Carlos Arias, presidente de la AAVV La Calzada. «Es importante no desgastarse y no cansar pronto», recuerda.
Hoy a partir de las 18.00 horas llevarán a cabo su último gesto de rechazo a las decisiones del Ministerio de Transportes con una gran lona que han bautizado como ‘la Pancartona’. La gigantesca tela vertical alcanza los siete metros y colgará a un lado de la fachada principal del Ateneo Obrero, edificio paradigmático del oeste gijonés, en señal de oposición a la licitación rechazada por Transportes que hacía posible desviar bajo tierra el tráfico de camiones dirigidos hacia El Musel y evitaba contribuir «a la histórica contaminación» en los barrios de La Calzada, El Lauredal o Jove.
El diseño está hecho en blanco, negro y rojo, los colores utilizados en el diseño del logo en forma de corazón que simboliza la lucha contra el vial. El corazón se incluye en el cartel junto al lema principal de los vecinos, «Autovía por Jove no», además de otros dos mensajes mucho más grandes que acaparan el espacio. «Gijón no se rinde, el Oeste no se rinde. 30 años de lucha», rezan las enormes letras.
Con la recogida de firmas en marcha de forma permanente, la gran tela oscura de hoy se considera más una «campaña de visibilización» a la causa y a la que esperan que se sumen cada vez más vecinos de Gijón con el reparto de trapos y lazos negros para colgar en las ventanas de las viviendas. Buscan que la protesta trascienda la mayor cantidad de fachadas posibles y que el gesto no se quede solo en los barrios afectados. La decepción de los gijoneses en pie de guerra se hizo latente durante su última protesta organizada el lunes a las puertas de la reunión de Gijón al Norte, en la que se encontraba el Secretario de Estado de Transportes, José Antonio Santano.
Las declaraciones de Santano en nombre del Gobierno central al término de la reunión no contentaban a los vecinos, ya que este cerraba la puerta de forma definitiva al soterramiento completo del vial con un túnel y hablaba de formas intermedias como «tramos semisoterrados o en trinchera». Gestos como el de esta tarde continúan persiguiendo ese compromiso sin ningún pero a la eliminación del tráfico en superficie.
