Por tercer año, los más antiguos de los integrantes del Club celebran su Comida de Hermandad, en la que entregaron sus distinciones especiales a Emilio Fernández, hijo del presidente ‘olayista’ José Fernández Miranda, y a Jesús Díaz Carvajal
Está meridianamente claro: lo que el deporte ha unido… Que lo refuerce la cocina. Y en cumplimiento de esa máxima, el pasado sábado se celebró en el Restaurante Savannah la III Comida de Hermandad de la Asociación de Veteranos del Club Natación Santa Olaya, durante la cual, además, se entregaron las Distinciones Especiales de dicho colectivo. Un hecho excepcional, en tanto en cuanto fueron concedidas dos, en lugar de la única habitual: a Emilio Fernández, hijo del presidente ‘olayista’ José Fernández Miranda, «por su historial en la natación y haber sido uno de los pioneros que picaron piedra», y a José Fernández Miranda, «por su trayectoria y lealtad al Club». En la misma comida se oficiaron las elecciones del equipo gestor de la Asociación de Veteranos, siendo elegidos los mismos del mandato anterior, que renovaron por unanimidad.
Enrique Plaza Martínez, presidente del Club, tuvo unas cariñosas palabras para los veteranos, a los que agradeció «el generoso trabajo que han hecho para el Club, de forma desinteresada, durante el año pasado». Una extensa relación de actos que incluyó una exposición fotográfica en el Ateneo de la calzada con motivo del 70º aniversario del Santa Olaya, la colaboración en la preparación del brindis conmemorativo en el exterior del club, la gala de reconocimiento a los dos primeros socios de cada década, y múltiples charlas que se llevaron a término a lo largo de esos doce meses. Todo ello, claro, sin obviar «el arduo trabajo que están realizando en cuanto a la organización y catalogación del archivo fotográfico». Así las cosas, no es de extrañar que Plaza desease que «sigan con las ganas y el espíritu que tienen en estos momentos».
La Asociación de Veteranos del Club Natación Santa Olaya está compuesta por 207 miembros, todos ellos han cumplido 50 años ininterrumpidos como socios del Club, momento en el que reciben la insignia de oro de la entidad. La mayor parte de los asistentes lucía con orgullo la insignia que los acredita. La asociación fue aprobada en la Asamblea ordinaria de socios del 28 de febrero de 2020 con el objetivo de aportar su conocimiento de la historia del mismo y participar en las decisiones estratégicas que deberá afrontar el Santa Olaya en el futuro. También tiene la responsabilidad de designar al ‘olayista’ ejemplar. Esta tercera edición (la pandemia impidió una de ellas) de la Comida de Hermandad ha sido la más representativa con 53 participantes. Entre los que destacaron el número uno y el número dos, Juan José Boadellla Amandi y Víctor Fernández Villaverde, respectivamente.