La droga incautada tendría un valor de venta de más de cuatro millones de euros
El polizón del barco interceptado en 2023 con 111 kilogramos de cocaína, con la intención de introducir la droga en Europa a través del puerto de Gijón, ha admitido los cargos presentados por la Fiscalía de Área de Gijón y ha acordado una sentencia de seis años y un día de prisión, además de una multa de seis millones de euros.
El barco, identificado como M/V ‘Iraklis’ y con bandera liberiana, partió de la ciudad de Barranquilla (Colombia) el 5 de marzo de 2023, transportando una carga de 27.200 toneladas de cok siderúrgico con destino al puerto de Gijón, donde arribó el 20 de ese mismo mes. Según el relato de la Fiscalía, el acusado, de nacionalidad colombiana, nacido en 1963 y sin arraigo en España, ingresó al barco con la ayuda de terceros, escondiéndose en el interior de la grúa número 2 de la cubierta.
El descubrimiento del polizón ocurrió el 7 de marzo, cuando un tripulante realizaba labores de limpieza y encontró al acusado, quien portaba cuchillos ocultos y documentación. Tras el aviso al capitán, se realizó una inspección en la grúa, donde se hallaron víveres y un traje de neopreno con capucha y escarpines. La inspección reveló más hallazgos al día siguiente, incluyendo un compartimento secreto que contenía 112 tabletas de cocaína con un peso neto de 111.443,13 gramos y una pureza del 79,6%. Una de las tabletas llevaba un dispositivo de seguimiento GPS. La droga incautada tendría un valor de venta al por mayor de más de cuatro millones de euros. El procesado ha estado en prisión provisional desde el 22 de marzo de 2023. Los hechos fueron calificados como delito contra la salud pública, con agravante de notoria importancia. Tras aceptar los cargos, el acusado fue condenado a seis años y un día de prisión, con multa y la prohibición de regresar a España durante diez años tras cumplir dos años de condena.