¿Pensando escapada para el fin de semana? Ahí va uno de esos pueblos asturianos no tan conocidos fuera de nuestra región
Cuando llega el verano en Asturias, todo el mundo tiene en mente aguas cristalinas, buenas temperaturas, y playas llenas de gente, pero pocos se acuerdan del interior rural. En eso, el Suroccidente, a diferencia de las montañas de Picos de Europa al oriente del Principado, sigue siendo un gran desconocido para muchos turistas, y por eso algunos de sus pueblos recónditos, a caballo entre los Oscos asturianos y la provincia de Lugo, destacan por su tranquilidad.
Con el concejo de Taramundi ocurre lo mismo. En el centro de la Reserva de la Biosfera de Oscos, Eo y Terras de Burón y en plena Ruta del Agua se localizan algunas aldeas propias de cuento de hadas, con casas de piedra y amables riachuelos que invitan al descanso. Entre ellos puede visitarse As Veigas, una localidad que intenta sobrevivir a la galopante despoblación que asola a esta zona del Principado desde hace décadas a partir del turismo rural. A pesar de la difícil situación, este recóndito pueblo se ha convertido en parada obligatoria para muchos.
As Veigas tiene tres casas rurales donde poder alojarse, se puede recorrer a pie y sus calles empedradas trasladan a otro tiempo, con ventanas de madera, muros de piedra, puentes y puertas antiguas al estilo asturiano.