La diputada considera «imprescindible» tener un fondo público de inversión para pelear por las empresas estratégicas en Asturias, y denuncia que el Principado «no está haciendo lo suficiente para asegurar los puestos de trabajo» en la región
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Es una pregunta casi tan antigua como la trayectoria de la empresa como ente privado: ¿cuánto tiempo se quedará ArcelorMittal en suelo asturiano? Y, tan importante como la duda anterior… ¿En qué condiciones? Se trata de dos cuestiones largamente formuladas, pero que tienen respuestas poco halagüeñas para la diputada del Grupo Mixto Covadonga Tomé. La que fuese cabeza visible de Podemos en la región ha alzado la voz este martes para alertar de que, a su juicio, la multinacional del acero «da pasos claros hacia el cierre progresivo», y para pedir una actuación en firme para evitarlo por parte del Gobierno de la comunidad.
Tomé, que esta mañana se ha reunido con trabajadores de la compañía en sus instalaciones de Gijón, ha recordado que sobre la mesa continúa un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afecta a 130 personas sin contrato relevo. «Las nuevas contrataciones que lleguen ahora serán temporales, precarias, con peores condiciones que las de los trabajadores y las trabajadoras que salen», ha asegurado la parlamentaria, quien opina que el Ejecutivo de Adrián Barbón «no está haciendo lo suficiente para asegurar los puestos de trabajo en la comunidad autónoma».
En la actual coyuntura, para Tomé resulta «imprescindible» que la región disponga de un fondo público de inversión para pelear por las empresas estratégicas en Asturias. Un fondo que, según ella, proporcione «la capacidad de intervención del Gobierno en estas empresas, y el compromiso de permanencia a cambio de cada euro de dinero público que se invierta en ellas». No en vano, «no podemos permitir que esto continúe así, no podemos permitir que se sigan perdiendo cada día nuevos puestos de trabajo en la industria asturiana».
Unido a ello, Tomé ha apelado a la «difícil» situación de los trabajadores de la línea Sekurit de Saint-Gobain en Avilés. «Un nuevo cierre de la industria asturiana con claros fines especulativos, que pone una vez más de manifiesto el escaso compromiso de estas multinacionales con el territorio y, por tanto, la necesidad de implantar ya el fondo público para evitar nuevos cierres», ha lamentado.