El portavoz municipal, Jesús Martínez Salvador, sale al paso del la confirmación del club de que no habrá campeonato en El Molinón, y asegura en ‘El Larguero’ que el interés es sincero, pero que la ciudad «no puede asumir todos los costes»
Gijón todavía se esfuerza por encajar el empate cosechado anoche por el Real Sporting con el Espanyol y, por extensión, la evaporación de sus posibilidades de ascender a Primera esta temporada… Y, sin embargo, de repente otro pequeño resquicio de luz, diminuto pero real, se ha abierto en el segundo frente futbolístico de la ciudad, y que también parecía perdido: la posibilidad de que llegue a ser una de las sedes del Mundial de 2030. Porque, a pesar de que hace dos días el club rojiblanco dio por perdida la candidatura, señalando como responsable al desinterés mostrado por el Consistorio y el Principado, ayer el portavoz del Gobierno municipal, Jesús Martínez Salvador, intervino en el programa radiofónico ‘El Larguero‘ de la cadena SER para atajar las declaraciones del Sporting, y dejar claro que «Gijón sí quiere ser sede del Mundial«… Aunque no a cualquier precio.
«Lo que dijo la alcaldesa, con todo el criterio del mundo, es que el Ayuntamiento no puede asumir todos los costes«, puntualizó Martínez Salvador, en una intervención que puede escucharse en el enlace superior, a partir del minuto 57. El edil de Foro, en respuesta a las preguntas del presentador Manu Carreño, insistió en que «al Grupo Orlegi le planteamos que nos presentara un plan de financiación para que pudiéramos repartirnos las cargas entre nosotros, el Gobierno autonómico y el club, y eso no ocurrió«. Ante esa ausencia de un proyecto claro, detallado y distribuido entre todos los actores implicados, en el Ayuntamiento «no podemos firmar un montón de contratos vinculantes con la FIFA sin tener apoyo de todos los demás; Gijón está dispuesto a invertir, pero no podemos asumir nosotros solos los gastos de organización y de la reforma del estadio».
A ese respecto, una de las imposiciones de la FIFA para considerar la opción de Gijón es que El Molinón pase de sus 29.000 plazas actuales, que, en opinión de Martínez Salvador, «están muy bien» y brindan «unas cifras espectaculares, dignas de Primera División», a 40.000. Para lograrlo, el desembolso sería multimillonario, tal como contemplan los pliegos iniciales compartidos con el Grupo Orlegi. A mayores, en su comunicado de hace dos días el Sporting puntualizó que dispone de los estudios económicos y del plan de financiación listos para ser presentados; no obstante, a la reunión convocada para el pasado martes no se presentaron ni el Ayuntamiento, ni el Ejecutivo regional. Sobre esa ausencia también se pronunció el concejal forista, tachando de «irresponsable ponernos a hablar del Mundial que se celebra en seis años a dos días del partido más importante de las últimas temporadas. Le dijimos al club ‘Vamos a jugar el partido, vamos a ganar el playoff y, después, nos sentamos tranquilamente a estudiar cómo reconducir esto'».
Por el momento, el plazo para remitir la documentación pertinente sigue abierto, gracias a la prórroga aprobada para la subsanación de problemas, y se mantendrá así, presumiblemente, hasta finales de mes. Porque el 30 de junio será el día en que la Real Federación Española de Fútbol remita a la FIFA los últimos pliegos de aquellas ciudades que aún están en duda; desde ese momento, ya no habrá vuelta atrás. Lo que ocurra en Gijón a partir de ahora dependerá de los tres actores en juego, aunque Martínez Salvador concluyó ayer su asistencia a ‘El Larguero’ con una reflexión tajando: «Un gestor público no puede comprometer el futuro de su ciudad por algo que tiene tantas incertidumbres. Seguimos dispuestos a que Gijón sea sede del mundial, siempre que haya un reparto de cargas, y sea asumible y responsable».