Los carbayones llegan con ventaja a una final marcada por la emoción vivida el pasado domingo en el Tartiere
Y llegó el día para los del Oviedo. El equipo azul se juega esta tarde el último billete para la Primera División, en su último encuentro de Playoff contra el RCD Espanyol en el Stage Front Stadium. La oportunidad con la que el equipo de la capital lleva soñando 23 años después del descenso se hará hoy realidad cuando el esférico se ponga en juego a partir de las 18.30 horas. Los carbayones fueron arropados ayer en el aeropuerto barcelonés del Prat por una afición entregada al sueño oviedista, como quedó demostrado en el partido de ida que se jugó en casa, marcado por la atmósfera de emoción que se generó desde el inicio del encuentro.
Los azules llegan con la ventaja de ese 1-0 del Carlos Tartiere, pero para ganar esta tarde a los de Cornellá, el técnico asturiano Luis Carrión, ha querido entrenar durante la semana «como si no existiera el partido de ida» y sin «mirar el resultado», ya que lo único necesario hoy en el Stage Front es «ser mejores que ellos». Y en efecto así es, porque si se diera el empate, pasaría el equipo catalán al tener un mejor puesto en la tabla. A los dos conjuntos solo les sirve la victoria para ascender.
En el partido de ida, el conjunto de la capital se adelantó gracias a Alemão en el 72′, un 1-0 que terminó siendo el resultado final porque el VAR anuló el tanto de Masca, en fuera de juego por milímetros, que pudo haber dado más ventaja todavía al equipo para el encuentro decisivo de hoy.
