El hombre, nativo de Luanco, era miembro de la dotación de uno de los ferries que cubren la ruta hacia y desde Formentera; las causas de la agresión, que ha dejado a una de las víctimas herida grave, todavía se desconocen

«Fue de película», «Ha sido un horror», «Nadie se lo esperaba»… Entre quienes tuvieron la mala suerte de encontrarse anoche en la Estación Marítima de Ibiza circulan hoy las más variadas frases, reflexiones, afirmaciones y teorías para describir las escenas allí acontecidas. Si embargo, lo único seguro es que, en la madrugada del domingo al lunes, un joven de unos treinta años, nativo de Luanco, con domicilio en el archipiélago balear y contratado como marinero en uno de los ferries de la naviera Formentera Lines, cogió un hacha y, por razones que aún se desconocen, la emprendió contra sus compañeros de tripulación. El sujeto fue detenido por agentes de la Policía Nacional, pero no sin que antes llegase a herir a cuatro personas; una de ellas, de gravedad.
Según recogen hoy los diarios El Comercio y La Nueva España, conocidos del ahora arrestado afirman que se trataba de una persona afable y de buen carácter, si bien en los últimos días su comportamiento había sufrido cambios. La investigación policial continúa abierta, y se espera que, en las próximas horas, los uniformados adscritos a la Jefatura de Baleares den a conocer nuevos detalles sobre el impactante suceso.