Desde el PP local y autonómico afean que Pedro Sánchez «sigue sin entender que hablamos de la salud de los vecinos», mientras Izquierda Unida
El nuevo terremoto declarado en torno al vial de Jove, después de saberse que el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico (MITECO) estudia alternativas al proyecto sin retomar el soterramiento originalmente planteado, ya ha comenzado a producir secuelas en las escenas políticas gijonesa y asturiana… Aunque aún no registradas en los propios Gobiernos. Porque los primeros en alzar la voz han sido el Partido Popular (PP), parte del Ejecutivo local en Gijón, cierto, aunque en la bancada de la oposición a escala autonómica, y la representación gijonesa de Izquierda Unida (IU). Dos fuerzas aparentemente antagónicas que, sin embargo, coinciden en su rechazo tajante a la posibilidad de que los carriles del vial, aun siendo parcialmente sumergidos mediante la excavación de trincheras, continúan fundamentalmente en superficie. Eso sí, por el momento Foro, formación a la que pertenece la alcaldesa de la ciudad, Carmen Moriyón, ha declinado hacer declaraciones, a la espera de que la propuesta estatal llegue a sus manos.
Ese último detalle no ha impedido que tanto la portavoz del Grupo Municipal del PP, Ángela Pumariega, a la sazón vicealcaldesa de ese Ejecutivo local de coalición, aunque hablando sólo en nombre del partido, como el diputado en la Junta General Andrés Ruiz han tachado el proyecto, sin ambages de «burla a los vecinos, y un insulto a todas las instituciones implicadas». ¿La razón para semejante afirmación? Para Pumariega radica en que, independientemente de que el Gobierno nacional «vuelve a dejar claro que sus promesas electorales no eran otra cosa que engaños», el ‘atrincheramiento del vial es «una alternativa que sólo reduce el impacto visual, pero que no ofrece soluciones a la problemática de la contaminación que están soportando decenas de miles de vecinos de la Zona Oeste (…); simplemente se ha optado por una solución sensiblemente más barata que la que se había prometido inicialmente». De ahí que las noticias conocidas este lunes, y trasladadas al Ayuntamiento y al Principado por el secretario de Estado de Transportes y Movilidad Sostenible, José Antonio Santano, prueben que el PSOE nacional «sigue sin entender que estamos hablando de la salud de los gijoneses. No se han molestado ni lo más mínimo en comprender el alcance que para la ciudad tiene el vial de Jove».
Ese planteamiento era reforzado minutos después por Andrés Ruiz. «Se obvia el clamor político y vecinal por un vial soterrado», ha sentenciado el diputado del PP, echando la vista atrás hasta 2005, año en que se proyectó el primer esbozo del vial. Una «promesa electoral de Barbón y Sánchez» que, en opinión de Ruiz, «con el anuncio en el último Consejo de Ministros previo a las elecciones autonómicas y municipales fue utilizada para insuflar aire electoral a las malas previsiones del socialismo en Gijón». Superada aquella fase, y de nuevo en el presente, ahora el PP aguarda a «ver cuál es la posición del Ejecutivo autonómico», del que, ha señalado, apenas espera «un titubeo eterno». La andana del diputado también ha hecho blanco en la delegada del Gobierno nacional, Adriana Lastra, a la que ha afeado que «no quisiera valorar esta cuestión» ayer martes, «más ocupada en tratar de censurar la homilía del obispo, o en utilizar los medios de la Delegación de Gobierno en luchar contra molinos de viento disfrazados de gigantes críticos socialistas». La despedida de Ruiz ha incluido una reclamación al equipo del presidente asturiano, Adrián Barbón: que «eleve la voz contra el nuevo atropello del reprobado Óscar Puente».
Tampoco en las filas gijonesas de Izquierda Unida han escatimado en pólvora. Su portavoz en el Pleno, Javier Suárez Llana, ha comenzado su aportación afirmando sin matices que la propuesta de Madrid «no cumple con las exigencias que, de forma unánime, defiende la ciudad. Mantener el tráfico en superficie lo que hace es trasladar unos metros el problema, pero no lo soluciona. Y las trincheras que plantea pueden mitigar el impacto visual, pero no el efecto barrera que crea el vial, con una ronda partiendo en dos la parroquia de Xove». Así, el edil ha cargado contra un Ministerio, el encabezado por Óscar Puente, que «no puede seguir despreciando a Xixón; tiene que venir a escuchar tanto a la parte política, como a la vecinal y la social antes de seguir tomando decisiones que no cuentan con el respaldo de la ciudad». No en vano, ha terminado Suárez Llana, «los consensos no se articulan bajo la premisa de ‘esto o nada'».
Por el vial de Jove si se preocupan, ahora por no dejar dormir hasta las 4 de la mañana en días laborables a los vecinos pq les plantan fiestas debajo de casa, con eso miran para otro lado. Doble rasero de los políticos y las asociaciones de vecinos, contaminación es todo la polución y la acústica!!