Sólo un día después de la entrada en servicio del centro logístico, el elevado flujo de camiones ha forzado a restringir el tránsito al OVD-1; mientras se estudian formar de hacer el tráfico más fluido, la entrada por Los Campos continúa abierta
Es un mantra que resulta inevitable asumir: en un altísimo porcentaje de los casos, la puesta en marcha de cualquier novedad lleva aparejada la aparición de problemas, a subsanar durante los primeros kilómetros de rodaje. Eso es lo que le está sucediendo en las últimas jornadas al polígono de Bobes, en Siero, y más, concretamente, a la multinacional Amazon, su inquilino de más renombre. Sólo un día después de que este lunes la multinacional de la compraventa iniciase las operaciones en el que es su primer centro logístico en suelo asturiano, el OVD-1, ayer martes el Principado cortaba al tráfico el acceso al mastodóntico complejo desde la carretera AS-17, la ruta más directa entre dicho lugar y Oviedo. Una medida justificada por el incremento del tránsito de vehículos, en particular de camiones pesados, y para la que ya se están evaluando alternativas que añadan fluidez al tráfico.
Mientras dure esa limitación, los transportistas y particulares que intentan entrar en el complejo ven obstaculizado el camino por una barrera de pivotes verdes, debidamente señalizados y de cuya presencia se alerta con cartelería colocada al efecto varios metros antes de llegar a la barrera. En las actuales circunstancias, la mejor alternativa es dar un rodeo hasta alcanzar el camino de Los Campos, todavía operativo. En cualquier caso, esta situación perjudica no sólo a la propia Amazon, que en sus primeros compases opera con alrededor de 400 empleados, a la espera de aumentar esa cifra hasta 1.500 conforme se estabilice su actividad; también a la primera de las dos gasolineras previstas en la zona, ya operativa.
La decisión del Gobierno autonómico llega en pleno escenario de malestar en el Ayuntamiento de Siero, crítico con la puesta en marcha del centro logístico sin que los accesos por carretera al mismo esté completos. A finales de la semana pasada el alcalde del municipio, el socialista Ángel García, criticaba esa falta de previsión en un momento en que se espera que la actividad en Bobes se multiplique por el aterrizaje de Amazon.