La empresa gijonesa responsable de ‘iluminar’ la ciudad gallega cuentan que «ha sido un sueño poder participar en el proyecto»
Vigo y Navidad son dos conceptos que ya están unidos en el imaginario colectivo de los españoles para los restos, y es que la ciudad de Pontevedra decora sus calles cada año con una de las iluminaciones festivas más espectaculares a nivel nacional e internacional. El sábado pasado, el icónico Abel Caballero -alcalde y artífice de este hito para la localidad- fue el encargado, una vez de más, de presionar el botón de encendido que iluminaría Vigo hasta pasadas las fiestas, a través de las más de 11,5 millones de luces LED que se encuentran repartidas por 420 calles de la zona céntrica y comercial de la localidad. ¿Detrás de todo ese despliegue? Pues para sorpresa y satisfacción de más de uno, la multinacional Ximenez Group y en colaboración con ella, una empresa de Gijón perteneciente al sector y encargada de haber animado y decorado una innumerable cantidad de fiestas prao, romerías y demás eventos en distintos municipios de Asturias.
Iluminaciones Rosete ha tenido el “honor” de encargarse del diseño y ‘megaproyecto’ decorativo para Vigo este año, gracias a haber realizado ya trabajos previos junto a la multinacional Ximenez. Se trata del encargo “más importante” a ese nivel ahora mismo en España y por eso mismo, el responsable de la empresa, Juan Manuel Rosete, considera que ha sido “un sueño” haber participado en ello. “Trabajamos a un nivel altísimo, con equipos tan grandes de personas coordinándose, siempre con unos 7 u 8 equipos de trabajo simultáneamente por allí… Un placer”, recuerda el gijonés.
Pasearse por Vigo a lo largo de este mes y hasta que termine la Navidad resulta una gran fuente de inspiración tanto para visitantes como para expertos, hasta el punto de pensar en la manera de trasladar ese “espíritu de capital navideña” hasta otros lugares como Gijón, una ciudad de características similares a la gallega. Si los entendidos tuviesen su ciudad ‘desnuda’, como un lienzo en blanco en el que salpicar iluminación, creen que apostarían por “incluir variaciones de los elementos espectaculares como las que pusimos en Vigo tipo cajas de regalo o bolas gigantes, algo digital, generar algún espectáculo con luces, música y sonido y así generar atmósferas”…
El responsable de Rosete cree que algún modelo vigués podría tener encaje en zonas similares de Gijón, como podría ser una gran arteria comercial peatonal, en nuestro caso, la calle Corrida: “En Vigo hay varias calles principales en el centro que llevan a la Puerta del Sol, y en ellas incluimos cosas colgadas al techo pero lo combinamos con mucho elemento de suelo (renos gigantes o un bosque mágico), y si mezclas ambos se crea mucho ambiente”.
Por otro lado, el gijonés no se muestra nada partidario de ‘apagar’ o ensombrecer a los barrios más periféricos a las zonas centro en este tipo de ciudades, aunque entienden que en los proyectos decorativos de iluminación navideña resulta lógico que las zona más visitadas y transitadas se lleven el protagonismo. Aún así recuerda que “es importante que se lleve un poco de vida a todos los puntos de una localidad y que en todos todos los barrios haya algo para que todos puedan disfrutar de la iluminación, también la gente mayor que no se pueda desplazar de su barrio, todo el mundo tiene derecho a ser partícipe en la Navidad y en celebrar las fiestas con sus vecinos”. Barrios de Vigo más alejados de las zonas céntricas incluyen este año distintas cosas: arcos, motivos, photocalls, árboles con LEDs…
Rosete considera que la apuesta temática desde el Ayuntamiento de Vigo en explotar ese filón navideño (y llamar con él a la actividad turística, el comercio y consumo, y crear un efecto llamada en general) podría “exportarse” perfectamente a otras localidades como Gijón, solo haría falta “voluntad” e intención de hacerlo, y es que cada Consistorio se encarga de “especificar las condiciones de los servicios que quiere y la cantidad de elementos que se pueden pagar con el presupuesto que se destina a ello” en los pliegos de la contratación, como ocurre en Vigo, y este podría modificarse como se quisiera en ese sentido. Solo es cuestión de “dar” al interruptor.