El presidente asturiano se ha reunido con su homólogo catalán para reforzar los «lazos en común» entre ambas regiones, y trabajar conjuntamente «para mejorar los servicios públicos» y en pro de «una España plural y diversa»
Hay poco menos de 888 kilómetros, el equivalente a más de ocho horas y media de viaje por carretera, entre Oviedo, capital de Asturias, y Barcelona, su equivalente en Cataluña. La distancia entre esas dos ciudades es abultada, salta a la vista; sin embargo, esa lejanía no impide que sean muchos, y razonablemente sólidos, los nexos que ambas comparten, al igual que sucede entre las regiones a las que sirven de mascarones de proa. Y esa conexión es la que esta mañana, en el Palau de la Generalitat, han puesto en valor tanto el presidente catalán, Salvador Illa, como su homólogo asturiano, Adrián Barbón, en el transcurso de la visita que este último ha hecho al feudo del primero. El suyo ha sido un encuentro marcado por el tono «cordial» y el afán constructivo, concebido para reforzar los «lazos en común», en palabras de Illa, y para apostar por «una España plural y diversa».
Con Asturias, ha continuado el dirigente catalán esta mañana, en declaraciones a través de la red social X (la antigua Twitter), «compartimos valores importantes«, un elemento de importancia capital que permitirá a las dos regiones operar en consonancia «para mejorar los servicios públicos». Las suyas han sido unas palabras refrendadas sobre el terreno por el líder asturiano, quien ya recibió a Illa en Oviedo el pasado 25 de octubre, coincidiendo con la entrega de los Premios Princesa de Asturias.
Las ultimas balanzas fiscales internas de Catalunya publicadas por la Gene fueron en 2015. Después no han vuelto a publicar. Que curioso
La Generalitat obtiene de Barcelona el 82,8 % de sus ingresos propios, pero destina a esta provincia sólo el 65,9 % de sus gastos. La diferencia entre ambas magnitudes es un déficit fiscal de Barcelona del 16,9 % de su PIB provincial. De cada 100 € que los ciudadanos y las empresas residentes en la capital pagan en impuestos al gobierno catalán, 17 € no retornan a la provincia.
Los sujetos fiscales residentes en las provincias de Girona, Lleida y Tarragona aportan porcentajes muy pequeños del total de ingresos de la Generalitat (entre el 4 y el 7 % cada una) pero reciben hasta tres veces más en gastos.
La inversión por habitante del gobierno catalán en la provincia de Barcelona, cifrada en 115 € por persona, es un 36% inferior a la del resto de catalanes, 180 € por persona. La Generalitat practica, pues, dentro de Cataluña una redistribución territorial con transferencia de flujos de solidaridad desde las zonas más dinámicas económicamente a las menos dinámicas, y lo hace de manera semejante no muy distinta a lo que ocurre entre Cataluña y el resto de España.
Lo que es bueno y justo para un español de Girona y Lleida es bueno y justo para una español de Cuenca, Badajoz o Teruel.
Gracias queridos conciudadanos de Girona y Lleida por estar de acuerdo con la redistribución de la riqueza en España
Es decir.
Para todos los que se pierden está cuestión.
¿Qué modelo de financiación deberíamos tener en España?
Respuesta:
El mismo que aplica el gobierno de la Generalitat dentro de Cataluña para cobrar y gestionar el dinero entre Girona, Lleida, Tarragona y Barcelona.
¿Aplica una financiación singular para la provincia de Barcelona?
No. Pues así para toda España. Todos iguales.
¿Aplica un principio de Bilateralidad a la provincia de Barcelona?
No. Pues así en toda España. Todos iguales.
¿Aplica un principio de ordinalidad?
Ni por asomo. Hay ciudadanos catalanes que recibe un gasto hasta 3 veces mayor que los ciudadanos de la provincia de Barcelona.
Pues así en toda España.