La asociación de consumidores reclama al Gobierno que destine los «recursos que sean necesarios» para frenar la escalada de problemas en el servicio ferroviario de vía estrecha en Asturias, y que afectan a trenes e infraestructuras por igual
El vaso de la paciencia de FACUA con el transporte ferroviario de vía estrecha en Asturias se ha colmado… Y desborda. La asociación de consumidores ha emitido este martes un comunicado llamando la atención a RENFE para que, «de una vez», invierta el tiempo y los recursos «que sean necesarios» para solventar las «numerosas deficiencias» que la red de ancho métrico, antaño perteneciente a la extinta empresa pública FEVE, padece en la región. Un catálogo de problemas ya abrumadoramente amplio, todavía en expansión y que ha llevado a que, siempre según el organismo autor de la queja, a finales del mes de octubre se viviese una ola de hasta 230 cancelaciones de trayectos, llegando a acumularse hasta cuarenta en un único día. La situación, en suma, es, a juicio de los usuarios, intolerable.
Las incidencias conocidas, de las que se acumulan los escritos de protesta emitidos por los viajeros, son variadas, y afectan tanto a los trenes propiamente dichos, como a las infraestructuras ahora dependientes de ADIF. Convoyes obsoletos, mantenimientos insuficientes, estaciones sin ninguna clase de servicio, catenarias en mal estado, vegetaciones que invaden las vías o desprendimientos puntuales son algunos de los percances que viven las composiciones de ancho métrico, en las que se han hecho familiares los retrasos y las suspensiones. Uno de los casos más recientes se vivió el pasado viernes, en la línea que conecta Gijón con Avilés, cuando una avería en un convoy en las proximidades de Zanzabornín obligó a suspender los tránsitos, ante la imposibilidad de desviar los trenes por otros trazados. Algunos de los viajeros llegaron a ser abandonados en Candás, sin que RENFE habilitase medio alternativo alguno para devolverlos a sus hogares, o llevarlos a sus puestos de trabajo.
Tal como recuerdan en FACUA, la Ley 38/2015, de 29 de septiembre, del sector ferroviario, establece en su artículo 58 que las empresas de transporte ferroviario de viajeros deben «determinar unas normas de calidad del servicio e implantar un sistema de gestión de la misma, para asegurar su mantenimiento». En relación a las normas de calidad, tendrán que ser referente, entre otras, a la «puntualidad de los servicios y principios generales para hacer frente a las perturbaciones en los mismos. Cancelaciones de servicios». De ahí que la asociación insista a RENFE en que realice las actuaciones que sean necesarias para garantizar un transporte ferroviario de calidad y que cumpla con los estándares exigibles por los usuarios. De igual forma, FACUA recuerda a los usuarios que se hayan podido encontrar con situaciones similares en su comunidad autónoma que pueden acudir a la asociación para que realice acciones en defensa de sus derechos.