El que fuese fundador de Foro y presidente del Principado se sienta hoy en el banquillo de los acusados, señalado por su propio partido por apropiación indebida de 181.648 euros; la Fiscalía pide para él tres años y medio de prisión
Casi dos años de espera, tres suspensiones consecutivas, unos hechos presuntamente delictivos que se remontan al 2011… Para muchos, tanto dentro como fuera del Principado, la causa pendiente contra Francisco Álvarez-Cascos por supuesta apropiación indebida de fondos de Foro ya comenzaba a dibujarse como una suerte de ‘obra de El Escorial’ jurídica, un proyecto tan dilatado en el tiempo, que comenzaba a alejarse de lo posible. Sin embargo, y a pesar de esas opiniones puntuales, el momento ha llegado. El que fuese fundador de Foro y presidente autonómico entre julio de 2011 y mayo de 2012 se sienta este martes en el banquillo de los acusados, en el pistoletazo de salida de un periplo que tratará de esclarecer si es cierta la denuncia formulada por el propio partido… Y, según la cual, habría cargado a sus arcas gastos de carácter personal, fraudulento en algunos casos, por un valor de 181.648 euros, que habrían incluido bienes y servicios tan variopintos como una cama nueva, pedidos de comida a domicilio, zapatos, billetes de AVE o entradas para disfrutar de la Copa Davis. Por todo ello, el Ministerio Fiscal reclama para Álvarez-Cascos la friolera de tres años y medio de prisión.
En esta jornada inicial del proceso el que fuese, además de los cargos anteriores, vicepresidente del Gobierno nacional entre 1996 y 2000 será sometido a interrogatorio por las partes, algo que continuará los días 9, 16, 21, 24 y 29 de enero, a falta de contratiempos. Sus aportaciones se perfilan como fundamentales para tratar de arrojar luz a unos hechos que, según el escrito presentado por la Fiscalía, se habrían desarrollado primeramente entre el 15 de mayo de 2011 y el 16 de octubre de 2017. En ese tiempo Álvarez-Cascos habría cargado a las arcas de Foro gastos por consumos no relacionados con su actividad política de hasta 7.793,22 euros, valiéndose del mecanismo de abono existente en el partido en ese momento, y que se basaba en el automatismo y en la confianza, sin que se hubiese implementado alguna forma de calificación sobre la procedencia o improcedencia de los cargos. La lista, como ya se ha adelantado, es, como mínimo variada… Desde los citados billetes, entradas y encargos gastronómicos a domicilio, hasta pases para el Museo Thyssen, una moqueta, tapicería y visillos, y gastos en restaurantes en localidades de veraneo.
El ‘regalo’ documental para la Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada
Pero las acusaciones vertidas contra el ex presidente del Principado no terminan ahí. Siempre a tenor de lo recogido en el texto del Ministerio Fiscal, el 8 de julio de 2011 Álvarez-Cascos cesó en su cargo como administrador de una sociedad mercantil que su pareja había constituido el 27 de febrero de 2004, pero de la que, de facto, había sido gestor el acusado, pese a que su condición entonces de ministro de Fomento se lo impedía legalmente. Por si fuese poco, su mujer resultó ser propietaria de cierto inmueble situado en el Paseo de la Castellana de Madrid, destinado al alquiler de oficinas. De nuevo según la fiscalía, en septiembre de 2012 Álvarez-Cascos habría tratado de aumentar los ingresos que percibía de Foro formalizando un contrato de arrendamiento ficticio de una de tales oficinas, por un valor de 2.404 euros mensuales, más otros 225 de una plaza de garaje, para documentar el pago de unas cantidades en concepto de renta del alquiler. Al año siguiente, en enero de 2013, repitió la operación; esta vez, con un despacho doble por importe de 3.600 euros al mes, y dos plazas más de garaje, por otros 450 euros. El contrato fue renovado al año siguiente y mantenido hasta su resolución, el 31 de diciembre de 2014. Todo ello se realizó a escondidas de la comisión directiva del partido, y Foro hubo de abonar 173.855,70 euros por tales operaciones.
La esperanza del partido del que Álvarez-Cascos fue fundador es que, en esta ocasión, el juicio se consume finalmente. Y no es un deseo sin razón. Los tres intentos previos de sentar al acusado en el banquillo se vieron frustrados reiteradamente. La primera vez, en mayo de 2023, por coincidencias en los señalamientos de los abogados, y las dos siguientes, en marzo y en octubre de 2024, por enfermedad del magistrado ponente e imposibilidad de reemplazarlo. Además, en enero del año pasado la Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada recibió un aluvión de documentos, incluidas facturas, contratos y escrituras públicas, con los que el Ministerio Fiscal armó la acusación ahora puesta sobre el tapete. Y, a la espera de constatar de qué modo evoluciona el proceso, no cabe duda de que uno de los momentos estrella será aquel en el que Carmen Moriyón, en la actualidad alcaldesa de Gijón y presidenta de Foro, testifique.