El que fuese vicesecretario de organización y cofundador del partido se suma a la afirmación de la alcaldesa de Gijón de que «nunca hubo sede en Madrid», y asegura que sus problemas con el ex presidente del Principado comenzaron en 2019, «cuando le llevé por primera vez la contraria»
El de Carmen Moriyón, actual alcaldesa de Gijón y presidenta de Foro Asturias, no fue el único testimonio aportado ayer en el transcurso de la causa contra el que fuese fundador del partido y ex presidente del Principado, Francisco Álvarez-Cascos, por la presunta apropiación indebida de 181.648 euros de la formación. Acabado el receso que se decretó tras la intervención de la regidora, tomó la palabra el vicesecretario de organización y cofundador de Foro, Enrique Lanza. Y lo hizo para alinearse, hasta cierto punto, con las declaraciones de Moriyón; especialmente en lo concerniente al carácter presidencialista de las decisiones en el seno de la fuerza, y a la inexistencia de la sede que, presuntamente, le fue alquilada al partido en un bloque de oficinas madrileño propiedad de la ex mujer de Cascos, María Porto.
«Es que no la hubo nunca», afirmó, tajante, Lanza, ahondando en el asunto al aseverar que «nunca tuvo ni dirección de correo electrónico, y ni siquiera teléfono; no hay nada de nada que acredite que allí hubo sede». Eso, en lo concerniente al inmueble, pero el compañero de fatigas políticas de Cascos también se pronunció este jueves sobre la manera de su líder de ejercer el poder. «En Foro todo lo decidía, tanto en el ámbito político como económico, Álvarez-Cascos; las decisiones siempre las tomaba él», señaló, recordando, a mayores, que «conozco a Cascos desde el año 82, en Alianza Popular. Nos reencontramos en 2010, en Foro Asturias. Fuimos amigos y compañeros hasta 2019, que le llevé por primera vez la contraria cuando quiso hacer un congreso para echar a Carmen Moriyón; como le dije que no, hoy estamos aquí».
Aunque mucho más escueta en el tiempo que la de la alcaldesa de Gijón, la aportación de Lanza también ayudó a añadir datos a otras cuestiones. Por ejemplo, a las condiciones económicas del ahora acusado; y es que Lanza negó ayer tener conocimiento de que «en esos inicios se pactase ninguna condición respecto a su remuneración de Cascos; estando yo presente no se le ofreció ningún acuerdo económico», un matiz que contradice el testimonio de propio Cascos. Del mismo modo, concretó que el entonces presidente «se cogía los días libres cuando quería, para ir a pescar o lo que quisiera, como todo el mundo, porque nadie trabaja constantemente». Y concluyó acotando que «los temas económicos pasaban de puntillas por la comisión directiva, nunca se trataban».