Desde este miércoles y hasta el 5 de febrero el Ayuntamiento mantendrá abierto el plazo para matricularse en la prueba de obtención del carnet profesional para taxistas, que autoriza a desempeñarse como chófer dentro del término municipal
Quienes sueñen con dedicar su futuro profesional a la conducción de taxis o, al menos, lo contemplen como una buena salida profesional están de suerte. En cuestión de horas, este mismo miércoles, el Ayuntamiento de Gijón abrirá una nueva convocatoria para la obtención del carnet profesional de taxista, que habilita para la prestación de servicios de auto-taxi dentro de las fronteras del municipio. Los interesados tendrán de plazo para inscribirse hasta el 5 de febrero, y todo indica que el examen se celebrará en el mes de marzo. Quienes lo superen estarán en condiciones de ejercer como chóferes tanto en régimen de asalariados, como de autónomos, previa adquisición de la licencia correspondiente. Toda la información, incluidos los requisitos a cumplir, los plazos y las fórmulas de matriculación, pueden consultarse en la página web del Consistorio gijonés.
Tal como detalla el impreso oficial, los aspirantes deberán estar en posesión tanto del permiso de conducción de la clase B como, obviamente, del documento nacional de identidad (DNI). El examen propiamente dicho estará dividido en dos partes, ambas en formato test; la primera de ambas se centrarán en evaluar los conocimientos del candidato en lo referente a la Ordenanza Municipal de Auto-Taxi de Gijón, al tiempo que la segunda, más técnica, estará orientada a probar el dominio del callejero, la ubicación de los edificios más relevantes y el control sobre los propios sistemas del taxi, entre otros contenidos. Aquellos que superen ambos bloques se harán merecedores del aprobado, y se incorporarán al ciclo de trabajo en el mismo mes de marzo o, a más tardar, en abril.
Desde los colectivos de taxistas animas a los interesados a dar el paso e inscribirse, enfatizando, además, el valor de hacerlo en esta primera convocatoria del año. Y es que conviene recordar que, por regla general, el Gobierno local habilita una segunda en octubre, con los exámenes fijados para noviembre; esa segunda opción deja un margen de aclimatación mucho menor, pues al poco tiempo comienza el ajetreo de las celebraciones navideñas, con los consiguientes cortes de calles, eventos multitudinarios y limitaciones al normal fluir de la circulación. En cambio, los candidatos que concurran ahora y aprueben tendrán casi dos meses de servicio ordinario antes del verano, tiempo que los veteranos del volante consideran más que suficiente para tomarle el pulso debidamente a la ciudad.