Un estudio conjunto de Lab4Future y Wuolah sitúa al centro asturiano como el cuarto de su clase peor valorado por los estudiantes, sólo por delante de los de La Laguna, Las Palmas y la Universidad a Distancia; la Politécnica de Valencia lidera la lista

Habría que retroceder un buen puñado de años, hasta alcanzar el lejano siglo XVIII, para aguzar el oído y escuchar al muy satírico poeta y filósofo inglés Alexander Pope proferir por primera vez cierta frase que, con el correr de las centurias, se ha convertido en todo un mantra social: «Errar es de humanos (…), rectificar es de sabios«. Pues bien, si tomamos por válido cierto reciente estudio elaborado por la empresa de orientación académica Lab4Future y por el centro de estudios Wuolah, la Universidad de Oviedo, el venerable templo del saber del Principado, tiene mucho en lo que rectificar… Y cuanto antes. Y es que, según revela el trabajo en cuestión, los alumnos españoles ubican el centro asturiano como el cuarto peor valorado del país, con una puntuación media de 3,3 sobre 5. Un aprobado no ‘raspado’, pero sí amargo si se analiza en el contexto general del conjunto del Sistema Universitario Español, ya que sólo la Universidad de La Laguna (3,13), la de Las Palmas (3,25) y la Universidad Nacional de Educación a Distancia (3,3) se hallan en posiciones aún más bajas. Todas ellas, como la ovetense, públicas.
El documento, fruto de una encuesta hecha durante el presente curso académico a 35.319 estudiantes pertenecientes al 99% de universidades españolas, públicas y privadas, arroja otros datos reveladores. Por ejemplo, que, independientemente de los estudios acerca de la calidad de la formación recibida, el alumnado de centros privados está, de media, un 9% más satisfecho que sus homólogos matriculados en la pública, gracias al nivel tecnológico ofrecido, y a la atención que se brinda al estudiante. Así, mientras en el sector privado la satisfacción es de un 3,95 sobre 5, en el público se queda en un 3,63. Y no deja de ser sintomático de lo anterior que, si bien es una universidad pública, la Politécnica de Valencia, la que encabeza la lista, con una calificación de 4,22 sobre 5, los tres siguientes puestos, de mejor a peor considerados, los ocupan centros privados: la Universidad Católica San Antonio de Murcia (4,18), la Loyola (4,17) y la CEU Cardenal Herrera (4,09). No es hasta la cuarta entrada cuando se localiza otro nombre público, el de la Universidad Pompeu Fabra (4,09 sobre 5).
Turismo, Estudios Ingleses, Sociología o Periodismo, entre las carreras ‘malditas’
Aun así, conviene resaltar que ninguno de los espacios que conforman el Sistema Universitario Español suspende; es más, hasta aquellos peor calificados se encuentran varias décimas por encima del corte. Más aún, la satisfacción media de los universitarios del país es de un 7,2 sobre 10, y el 81,7% de los jóvenes encuestados volvería a elegir el centro en el que se está formado actualmente, al tiempo que un 86,2% repetiría la carrera que cursa. Todo un mérito a tenor de que uno de cada tres asegura que empezó la formación escogida sin estar seguro de qué quería estudiar… En ese sentido, las diez titulaciones que los que los alumnos volverían a matricularse sin dudarlo son Enfermería, Odontología, Medicina, Psicología, Veterinaria, Educación Infantil, Ingeniería Biomédica, Educación Primaria, Fisioterapia y, finalmente, Educación Social. Nada que ver con Turismo, Estudios Ingleses, Sociología, Finanzas y Contabilidad, Economía, Administración y Dirección de Empresas, Ciencia y Tecnología de los Alimentos, Periodismo, Química y Marketing, con una tasa de reelección bastante inferior al 90% de las diez previas.
¿Qué lleva a los estudiantes a seleccionar una u otra carrera? Bien, sobre ese punto el estudio de Lab4Future y Wuolah también arroja algo de luz. El primer criterio es la vocación, desde luego, seguido por la empleabilidad; nada que ver con la elección del centro universitario, caso en el que el factor que más pesa es la cercanía y la accesibilidad… Por delante, incluso, de la nota de corte. Finalmente, el de los encuestados 53,6% afirma estudiar presencialmente; un 10,7% se muda a otra ciudad, y otro 2,9% estudia online. Y un último dato curioso: esa última modalidad de estudio, la telemática, demuestra ser más usual entre los mayores de 34 años (un 35%).
A la vista de todo lo anterior, queda claro que hay margen de mejora hasta alcanzar la matrícula de honor… Y el alumnado también tiene propuestas sobre ello. Por ejemplo, opinan, la satisfacción crecería si se reemplazase el sistema de evaluación actual por uno más centrado en la práctica, o si se igualase la educación en toda España, toda vez que se percibe una «injusta» diferencia de contenidos de materias y de nivel académico entre regiones. Los estudiantes también animan a integrar en los planes de estudio asignaturas como Lógica, Gestión del Hogar o cómo usar los smartphones. Y, no menos importante pese a cerrar la lista, ruegan dar mayor importancia a la creatividad y al razonamiento crítico.