Bicicletas, ropa de alta gama e, incluso, botellas de vino componían un botín obtenido a base de forzar las puertas al amparo de la noche, y saquear todo lo valioso que encontraba a su paso; el presunto ladrón ya ha sido puesto a disposición judicial
Que sí, que es un hecho… La convivencia no suele ser algo fácil. Ni dentro de una misma vivienda, en una comunidad. Porque… ¿Quién no ha tenido que vérselas con un vecino ruidoso, una gotera inesperada, el vaciado de la basura sobre la ropa tendida…? Sin embargo, lo sucedido en cierto inmueble de Avilés ha ido un paso más allá. Allí, en un bloque de la avenida Grandiella, agentes de la Policía Nacional echaban el guante a cierto sujeto acusado de haber entrado por la fuerza en, al menos, veintiséis trasteros de otro edificio de la misma comunidad, y haber sustraído de ellos diversos objetos de valor variables. El presunto caco ya ha sido puesto a disposición judicial.
Según las informaciones facilitadas por dicho cuerpo policial, el acusado actuaba al amparo de la noche, para no ser descubierto, y contaba con llaves de acceso a las zonas comunes de los edificios. Una vez elegido su objetivo, forzaba la puerta, entraba en el trastero y se llevaba lo que podía cargar, si bien hubo casos en los que no consumó el robo. No obstante, y en respuesta a las denuncias presentadas por los vecinos, las primeras pesquisas se iniciaron a finales de 2023, y pronto dieron sus frutos, reduciendo los asaltos. Meses después se logró un éxito mayor, al identificar al supuesto ladrón. Todo un avance si se tiene en cuenta que el botín incluía bicicletas, ropa de alta gama y botellas de vino, lo que generó una «gran inquietud» en la zona. Ahora, acusado de veintiséis robos con fuerza y de causar los daños consiguientes, deberá afrontar el peso de la justicia.
