La velada, en la que se entregaron los Premios ‘Paul Harris’ 2025, incluyó homenajes a Sara Lolo, Pablo Higinio Fernández García y Juan Rafael Martínez Merino
Entrega del ‘Paul Harris’ al socio Juan Rafael Martínez. / Reportaje fotográfico de miGijón 
Pablo Higinio Fernández, premio honorífico. 
La presidenta de los rotarios gijoneses con las homenajeadas. 
Todos los homenajeados. 
Parte del equipo de Club Patin Solimar Telecable con la presidenta de los rotarios. 
Foto de familia de las deportistas galardonadas. 
Paz Fernández Felgueroso con Begoña Piñero y Germán Heredia. 
Pablo Blanco y Jesús Kocina. 
El presiente del Santa Olaya con la directora de deportes del Principado. 
Ángela Pumariega charlando con Álvaro Queipo. 
Marta Pulgar y Cristina Liñero, de la junta del Real Grupo Cultura Covadonga.
Los rotarios gijoneses vivieron la jornada de ayer, jueves, con una gran intensidad de emociones.
La esperada cena de entrega de los Premios ‘Paul Harris’ 2025 tuvo un protagonista tristemente inesperado. El fallecimiento, a primera hora, de uno de sus miembros más queridos, el médico Juan Dopico, que estuvo en la mente de los asistentes al acto, que lo tuvieron bien presente en los comienzos de sus discursos.
Pero, como todo tiene que seguir hacia delante, el jardín del restaurante Somió Park, donde tuvo lugar la entrega y cena posterior, se fue llenando y en esta ocasión se adornó con la copa portada por las jugadoras del equipo homenajeado, el Club Patín Solimar-Telecable.
Su presidente, José Luis Souto, se sintió muy agradecido de que las “chicas del Telecable” recibieran un premio de una organización civil.
En cuanto a la capitana hasta ahora, Sara Lolo, que ya se ‘jubila’ de la competición después de más de dos décadas, se mostraba también muy satisfecha.
“Ya no juego más, y ahora lo estoy asimilando todo” comentaba. “Han sido muchos años chulos, y este año es el del broche, así que me voy contenta con la trayectoria”, concluía, antes de adelantar a lo que se dedicará a partir de ahora. “Yo soy médico y me tocará reengancharme de alguna manera, aunque poco a poco; quiero que me dé tiempo a asimilarlo todo”.
A la pregunta de qué supone este premio, Lolo respondió que, al ser para entidades que se abren a la sociedad, con preocupaciones sociales, es más gratificante. “Desde dentro en tu día a día no te planteas si realmente estás consiguiendo ese impacto social, pero si miramos a tras sí que es una preocupación que tenemos. La cercanía, la colaboración, de intentar hacer crecer y abrir las puertas a todos los niños y niñas. Sí, realmente es muy gratificante recibir este premio” concluyó.
Las jugadoras no fueron las únicas en recibir homenaje.
Los rotarios gijoneses tuvieron palabras de gran cariño para Pablo Higinio Fernández García, al que reconocieron como socio honorífico, así como un ‘Paul Harris’ para Juan Rafael Martínez Merino.
Además de la presencia de numerosos representantes políticos, entre los que se encontraban Álvaro Queipo, presidente del PP asturiano, y Monchu García, secretario general de la Agrupación Socialista Gijonesa, ambos acompañados de miembros de sus respectivos grupos, acudió Manuela Fernández Ena, directora general de Deporte, y la vicealcaldesa y deportista olímpica Ángela Pumariega.
Tampoco se perdieron la llamada de los rotarios gijoneses Nuria Pulgar, miembros del equipo directivo del Real Grupo Cultura Covadonga, y el presidente del Club Natación Santa Olaya, Gonzalo Menéndez, así como Pablo Blanco, director del Patronato Deportivo MUnicipal, y Begoña Piñero, presidenta del colectivo Les Comadres, que acudió a apoyar a las homenajeadas.
Y muchos miembros más de la sociedad civil asturiana que tanto representa el Club Rotario de Gijón.
Despidió el acto Patricia García Zapico, quien deja ya la presidencia de los rotarios, que, como dijo entre risas, “no es vitalicia”.
