A la cabeza de la movilización convocada por ‘Asturies Feminista 8M’, Adrián Barbón reclama una reforma de los contenidos educativos para formar en el respeto y la igualdad; como ya sucediese con el minuto de silencio en Gijón, Vox fue el único partido que se ausentó de la cita
Rota de dolor, desconcertada por lo ocurrido, buscando refugio en la solidaridad de todos y cada uno de sus vecinos… Pero aún firme, combativa y decidida a continuar la batalla contra la violencia machista. Así es como Laviana, el concejo en el que, este miércoles, Dolores F., ‘Lola’, de 86 años, perdía la vida presuntamente a manos de su marido, ha demostrado estar este jueves, en el transcurso de la concentración en señal de repulsa por dicho crimen que, a las cinco de la tarde, se celebró ante la Casa Consistorial. Y no está sola. Como si de una única voz se tratase (o casi, dada la ausencia de Vox), Asturias respondió a la convocatoria hecha por la Plataforma ‘Asturies Feminista 8M’, y decenas de ciudadanos, así como representantes de la mayoría de los partidos políticos representados en la Junta General del Principado, acudieron para honrar la memoria de todas las fallecidas, y condenar sin ambages toda forma de agresión por razón de género. Y entre todas esas personas no faltó el presidente autonómico Adrián Barbón. Visiblemente deshecho, dada su doble condición de lavianés y de conocido de la última víctima, el líder asturiano aprovechó el momento para hacer un llamamiento en pos de una muy necesaria reforma del sistema educativo que, en último término, destierre discriminaciones e inculque valores de tolerancia y respeto.
«Todo lo que se haga es poco en condenar el machismo, en educar contra el machismo, en educar a favor de la igualdad, en que los niños y niñas crezcan siendo conscientes de que hay que respetar a las mujeres, que no son posesión ni dominación tuya, y que no puedes decidir sobre su vida o su muerte, que es lo que pasa en estos casos«, afirmó Barbón, apoyado por el alcalde de Laviana, un afectado Julio García, instantes después de que se completase el minuto de silencio dedicado a Dolores F. A la espera de que las investigaciones concluyan, y con su supuesto homicida, de 90 años, recluido en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), el presidente sí quiso enfatizar el apoyo mutuo que los lugareños se están dispensando en estas jornadas trágicas. «Laviana no falla; es el único consuelo que podemos dar en estos momentos«, apuntó, con voz quebrada, para, a continuación aplaudir la solidaridad demostrada por una población, la de la cuenca minera, que, «una vez más responde ante cualquier manifestación de violencia machista, responde». Poco más fue capaz de añadir Barbón… Y tampoco era necesario, dado el cariz del evento.
Claro, que la gran pregunta que el presidente, como sus acompañantes, se hacía era si realmente esa estrategia de refuerzo educativo servirá para poner coto a una tendencia que ya parece ser una escalada en toda regla… Bien, una posible respuesta la aportó Begoña Collado, secretaria de Igualdad de Izquierda Unida (IU), y que puso voz a un partido que también estuvo representado por su coordinador general, Ovidio Zapico, y por la diputada Delia Campomanes. Arropada por ambos, Collado denunció abiertamente los «repuntes inaguantables» de violencia contra las mujeres, que ya se han cobrado 48 vidas por toda España en lo que va de año, y alertó de que esa «última ola de asesinatos nos pone los pelos de punta«, siendo «totalmente inaguantable en una sociedad como debería ser la nuestra«. Claro, que… ¿Cómo actuar? A ese respecto, la dirigente de IU reconoció que «todas las medidas que intentamos tomar son claramente insuficientes», razón por la que «no solo las Administraciones, desde la más pequeña a la más grande, deben poner todos los medios, sino que es el conjunto de la sociedad quien debe concienciarse, educarse y hacer pedagogía sobre feminismo y la lucha de las mujeres» Todo ello, a fin de que se logre ese ansiado objetivo de que «la mitad de la población pueda vivir sin miedo, ni violencia«.
Desde las filas del PP su presidente en la región, Álvaro Queipo, llevó la mirada más allá del drama de este miércoles, deteniéndola en el sabido la semana pasada: el hallazgo de los restos mortales de Susana Sierra, de 49 años, en una vivienda de Gijón. «Desgraciadamente, ya no se trata de un hecho aislado«, advirtió, pues, Queipo, siguiendo la estela marcada por Collado al plantear que, «evidentemente, lo que estamos haciendo como sociedad es insuficiente para evitar este terrible problema que nos afecta a todos«. Tajante en sus aseveraciones, el diputado popular alertó de que «nada, absolutamente nada justifica la violencia contra las mujeres», y sentenció que «vamos a seguir peleando, como sociedad y desde quienes tenemos responsabilidades públicas, para que todo el mundo tenga muy claro que cualquier agresión a una mujer es inaceptable».
Por el flanco institucional, el último en intervenir fue Adrián Pumares, secretario general de Foro Asturias. Más escueto que el anterior, aunque igualmente directo, tras emitir su «lamento y condena enérgica» por este «segundo asesinato machista en muy poco tiempo», se lanzó a la palestra de la reivindicación para reclamar, «una vez más, que no hay que dar ni un paso atrás en la lucha contra la violencia contra las mujeres. Hay que destinar todos los recursos a luchar contra ella«.
