
«Ustedes consuman y disfruten, no hagan caso a los pocos playos que todavía perduran por estos pagos. Son de espíritu lastimero, anclados en la queja»
¡Pasen y vean, queridos amigos!
¡Están en su nuevo hogar!
Me llamo Pelayo Rey, soy el director de Turismo Inmersivo de la ciudad y, en esta luminosa mañana de julio de 2040, seré el guía y, si es menester, el chambelán de este numeroso grupo. Recibimos con alegría su visita en este ‘barrio alto’ gijonés que antes recibía el nombre de Cimavilla y, gracias a su infinito cariño, decidimos rebautizar como Cachopolandia. El resto de Gijón, y Asturias entera, también se llaman así desde hoy mismo: Cachopo City y Principado del Cachopo. ¡Albricias! Necesitamos evolucionar, dejar atrás nombres de rancio abolengo, amontonados entre el polvo y el papel de olvidadas aulas y bibliotecas.
Ustedes consuman y disfruten, no hagan caso a los pocos playos que todavía perduran por estos pagos. Son de espíritu lastimero, anclados en la queja: «No tenemos centro de salud, no tenemos autobuses, no tenemos servicios públicos…». Siempre llorando; su hora ya pasó. Hoy es el momento de agasajar a nuestros mejores visitantes. Por algo vienen, ¿verdad?
Vayan pidiendo vasos de plástico en el Gastropaseo. Tienen sidra, licores y refrescos de todo tipo, pastas de manzana, minicachopos en baguette, chorizos, chipirones, hamburguesas de Asturiana de los Valles, bocartín con jamón… ¡Oigan! Cuando completen su kits les daremos una vuelta en barco por el muelle y, más tarde, van a gozar de la oportunidad de participar en una yincana que dará comienzo en las termas, y finalizará al amparo del ‘Elogio del Horizonte’.
Veo que son 300, como aquellos célebres espartanos. Je, je, je… Bonita cifra. No se me amontonen, en fila india, por favor. Les recuerdo que, abonando 80 euros más, se ganan el derecho a turuta y volador para tirarlo desde el cerro de Santa Catalina. Mi compañera, Olivia Giró, les dará una breve charla, con el fin de recorrer la singular historia de este barrio marinero preñado de entrañables personajes: ‘Rambal’, ‘La Prina’, Luis ‘el Chino’, ‘La Tarabica’… ¿Todos tienen gafas de realidad virtual? No se olviden de poner en la ficha qué terraza desean para cenar; les atenderán camareros con el atuendo tradicional marinero. Contamos con un menú cerrado: entrante de pastel de cabracho, fabada, cachopo y emulsión de arroz con leche, acompañado este menú de una jarra helada de sangría de sidra.
Y por último, me despido recordándoles que pueden, y deben, relatar, en sus lugares de origen, esta magnífica experiencia de inmersión turística. Guarden las maletas en los apartamentos asignados, los vecinos dejarán libres las estancias en diez minutos. No olviden que el botellón joven dará comienzo a las 23.45 horas. Y, si se lo pasan bien, que se lo van a pasar, díganselo a familiares, amigos y conocidos, hijas, hijos, sobrinos y nietos. El día de mañana podrán disfrutar de su despedida de la soltería, por un módico precio, en este norte que ya empieza a ser nuestro sur.
¡Pasen, vean y consuman! ¡Dispongan de Cachopolandia como les venga en gana!
Hablando de cambiar nombres….para cuando cambiamos el nombre de este «periódico» a Mi Cimavilla???
Es cansino la cantidad de artículos de opinion dedicados a este barrio.
El mas céntrico de Gijón, y como cualquier barrio céntrico del mundo es el que más turistas tiene. Venid a vivir a la zona Oeste si queréis tranquilidad….o no que nos meten la Semana Negra todos los años y de esa por lo que sea ninguno de vosotros protesta por aquí….
Lo de que no tenéis Centro de Salud es muy cansino, tenéis el mayor centro de salud a menos de 1 km que es el de Puerta la Villa con urgencias las 24 horas , no como muchos otros que no tienen.
Dejad de llorar ya por favor!!!!
Pero vamos a ver. ¿Usted qué quiere, que estemos jodidos y encima no protestemos? Es curioso la cantidad de gente que busca la nivelación de todo el mundo, pero por lo bajo, por la mala situación. Si usted no está satisfecho con el barrio donde vive, proteste, hombre, proteste, a ver si mejoran. Pero si decide no hacerlo no censure a otros. Yo, como vecino de Cimavilla, me alegro de que al menos un medio nos preste la atención que otros más poderosos no nos conceden.
Otros más «poderosos»???
Pero vamos a ver hace décadas que el barrio de Cimavilla es un barrio de ocio y movida nocturna. Y te lo dice alguien que trabajo allí 6 años.
No es algo nuevo para nada, de hecho en los años 90 la «folixa» que había en Cimavilla era el doble y los horarios de cierre y decibelios no se respetaban, algo que no ocurre ahora….
Salvo alguien que lleve viviendo en Cimata hace más de 50 años el resto no se porque protestan….como se suele decir «ye lo que hay».
Es como si compro un piso alao del Molinon y me quejo de que cuando hay partido no puedo aparcar fácil el coche, o compro uno enfrente la playa y me quejo de la humedad,….