El Patronato Deportivo Municipal propone el pabellón de Mata Jove, con un aforo cinco veces menor al necesario

El Telecable Gijón Hockey Club ha recibido esta semana un duro revés. Tras meses de trabajo, ilusión y compromisos políticos para traer a Gijón la Copa de la Reina de hockey sobre patines en 2026, el Patronato Deportivo Municipal ha decidido no apoyar su celebración. Una decisión que deja en evidencia al concejal de Deportes, Jorge Pañeda, y sitúa el foco sobre la alcaldesa Carmen Moriyón, a quien ahora recae la responsabilidad de dejar que Gijón pierda este evento de referencia nacional.
La historia comenzó en enero, cuando el club mantuvo una reunión con la propia alcaldesa y el concejal de Deportes. En ese encuentro se acordó que Gijón buscaría ser sede de la Copa en 2025, como colofón al 30 aniversario del club. Pero semanas más tarde, Pañeda comunicó que no sería posible por cuestiones presupuestarias, y emplazó a 2026 como alternativa viable. Desde entonces, el Telecable inició gestiones con la Federación Española de Patinaje y elaboró un completo informe sobre la organización y el retorno económico del evento.
El informe del club detalla cómo por cada euro invertido por el Ayuntamiento, se generarían casi diez de retorno. El impacto económico total superaría el millón de euros, con un retorno directo e indirecto estimado en 1.150.000 euros. A esto se sumaba la visibilidad mediática y la proyección internacional de la ciudad como destino deportivo y turístico.
Sin embargo, todo este trabajo se vino abajo esta semana. En una reunión celebrada el martes, el director y el concejal de Deportes comunicaron al club que no era viable celebrar la Copa. Alegaron dificultades para liberar el Palacio de Deportes en marzo de 2026 —espacio idóneo con capacidad para 5.000 personas— y propusieron como alternativa el pabellón de Mata Jove, con un aforo de solo 500. Una opción «totalmente inviable», según el club, que recuerda que la última vez que Gijón acogió un evento de este nivel (la Copa de Europa en 2022) más de 3.200 personas asistieron a la final.
La sorpresa fue mayúscula para el Telecable. «Lamentamos la oportunidad perdida», señalan y subrayan que esta cancelación no solo priva a la ciudad de un espectáculo deportivo de primer nivel, sino que también desbarajusta la planificación económica del club, que había contado con ser anfitrión del torneo.
El desenlace ha provocado indignación en el entorno deportivo local, donde se critica la falta de palabra del gobierno municipal. Para muchos, Pañeda ha «dejado tirado» al Telecable y a su afición. Ahora, todas las miradas se dirigen a la alcaldesa, que en su día calificó la Copa como un evento relevante para la ciudad.
El concejal de deportes debe dimitir por incompetente. Es él el que propone que se haga en 2026, ¿y aún así no lo tiene previsto? El Telecable no se merece el trato que está recibiendo, mucho menos tras los logros conseguidos. Si el Sr. concejal de deportes no arregla inmediatamente esto, que dimita y que lo arregle otr@; y si no que lo cesen.