Los convocantes alertan de la «escasa cantidad de interventores» en los trenes, unida al aumento en las cargas de trabajo, lo que ha hecho la situación insostenible

Vuelven a sonar tambores de guerra en el ámbito ferroviario asturiano. Y, esta vez, en el que es su buque insignia: la alta velocidad. Trabajadores de la plantilla de los trenes AVE en Asturias irán a huelga el próximo 31 de julio en protesta por la «escasa cantidad de interventores» y el aumento en las cargas de trabajo. Según han informado Comisiones Obreras (CCOO) y la Unión General de Trabajadores (UGT), el conflicto se inició el pasado 20 de mayo, cuando el sindicato denunció el desvío de tareas hacia otras provincias.
Desde entonces, afirman fuentes de CCOO, la empresa «se ha negado a acercar posturas con la plantilla», manteniendo lo que califican como una distribución desigual del trabajo en el conjunto del servicio estatal. El sindicato ha criticado que Asturias, «cabecera» del corredor de alta velocidad, cuenta con una plantilla «testimonial» que impide prestar un servicio «de calidad y con garantías suficientes de seguridad». En concreto, han señalado que estas dificultades son notables en situaciones de emergencia como la registrada el pasado 28 de abril, cuando se produjo un apagón en uno de los túneles de la variante de Pajares. En ese caso, una sola persona tuvo que encargarse de evacuar a 500 pasajeros, tal y como ha detallado CCOO.
El sindicato ha reclamado que, con las nuevas frecuencias y cargas de trabajo derivadas de la puesta en marcha de la alta velocidad «queden a cargo de la plantilla asturiana», al considerar que existe «una deuda de años en la prestación de servicios ferroviarios» en la comunidad. Ante la falta de acuerdo con la empresa tras varios intentos de negociación, los trabajadores irán a la huelga para el próximo miércoles 31 de julio.