La pérdida de control de un SUV eléctrico y de cambio automático, que estaba estacionado, al acelerar casi provoca una desgracia este miércoles al llevarse parte de la terraza de una cafetería en esta calle residencial del centro, donde un día después reinaba la normalidad

Un hecho puntual en una calle «por la que casi no pasan coches». Así valoraban testigos del accidente de la tarde del miércoles en Capua el suceso, donde la conductora de un SUV eléctrico y de cambio automático perdió el control del vehículo al acelerar, empotrándose con el portal del número 18 de la calle tras llevarse por delante parte de la terraza del Bella Vida, en la que se encontraban dos mujeres. Una fue derribada y sufrió un golpe en la cabeza, quedando debajo del coche, pero pudo salir con ayuda sin problema para esperar echada en la acera la llegada de los servicios de urgencia.
«La chica afectada parecía muy tranquila y los de alrededor estaban más alterados. Ella es médica, estaba consciente y en un momento dado sonrió», apuntan desde el local, que cuenta con una barra con ventana al exterior justo donde se produjo el choque con la pared, desde donde presenciaron el incidente. «La conductora estaba aparcada en la acera donde está ahora ese señor —señalan a un vehículo estacionado, para dejar paso, fuera de la calzada de esta vía residencial con plataforma única limitada a 20 kilómetros por hora— y con el reflejo vimos llegar el coche y a la chica volar», recuerdan.
Al día siguiente sí había muchos comentarios sobre un accidente que tuvo gran repercursión por la espectacularidad del mismo, pero la normalidad reinaba tanto en el establecimiento como en los colindantes. Así, en la terraza, único lugar que mostraba algún signo del choque, ciudadanos disfrutaban de las horas del buen tiempo que regaló ayer el día en las horas de la mañana. Una jornada más en esta siempre tranquila parte de Capua.