El informe del instituto gijonés destapa una sobrecarga burocrática que, según CSIF, lleva años minando la motivación y la salud del profesorado

En el marco del Día Mundial del Docente, que se celebra este domingo, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) en Asturias ha vuelto a reclamar la aprobación de un Estatuto Docente que regule de manera clara las responsabilidades, horarios, derechos y deberes del profesorado. Según el sindicato, esta normativa es “la base para dotar al profesorado de seguridad jurídica, estabilidad profesional y reconocimiento real”, algo que consideran imprescindible para garantizar la calidad de la enseñanza pública.
La organización sindical subraya que la Evaluación de Riesgos Psicosociales realizada recientemente en el IES Roces, en Gijón, ha confirmado técnicamente lo que llevan años denunciando: exceso de carga burocrática, indefinición de funciones, presión emocional y jornadas laborales que exceden lo razonable. “El alumnado se ha convertido en una excusa para la burocracia que nos asfixia”, denunció Jorge Caro, presidente del Sector de Educación de CSIF Asturias.
El sindicato recuerda que ya la pasada primavera convocó en solitario una huelga indefinida en la comunidad autónoma para alertar sobre esta situación. Aquella movilización, argumentan, puso de relieve que el modelo educativo se ha convertido “en una maquinaria administrativa que ahoga al profesorado”.
En este sentido, CSIF advirtió a nivel nacional que, si la reunión mantenida el pasado 23 de septiembre con el Ministerio de Educación no presentaba avances significativos, pondrían en marcha un programa de movilizaciones en todo el país. Una advertencia que, recalcan, “sigue plenamente vigente”.
Con motivo de esta jornada de homenaje a la docencia, el sindicato critica que las condiciones laborales, salariales y de reconocimiento social de los docentes distan mucho de ser adecuadas en España. Entre sus reivindicaciones destacan recuperar poder adquisitivo, adecuar los niveles funcionariales a la titulación requerida, reformar el sistema de acceso a la profesión, reducir la interinidad, establecer una carrera profesional real, disminuir la burocracia y dignificar la figura del profesorado.
En el caso asturiano, CSIF reclama a la administración autonómica que reconozca públicamente la gravedad de los riesgos detectados en el IES Roces y en otros centros, y que actúe con medidas concretas. Asimismo, piden que se active de forma inmediata la mesa nacional de negociación del Estatuto Docente con un calendario y compromisos firmes, y que el Principado “demuestre con hechos” su apuesta por la educación.
“Desde CSIF no aceptaremos gestos simbólicos vacíos. Mientras no concretemos mejoras reales para los docentes asturianos, seguiremos vigilantes y activos”, concluyó Jorge Caro.