La plaza de toros acogerá el domingo 14 una jornada con actuaciones y pinchadas de los grandes nombres de la escena para homenajear al artista que falleció al ser agredido aleatoriamente en la madrugada del 1 de noviembre por un individuo en Corrida cuando regresaba de trabajar, y ayudar a su familia
Hace ya más de un año de su pérdida, pero la comunidad musical asturiana no olvida a Eloy Malnero. El conocido DJ y productor de la escena electrónica, que falleció con 56 años a manos de un individuo que lo agredió en la calle Corrida la madrugada del 1 de noviembre cuando regresaba a casa con su pareja después de trabajar en un local cercano, será homenajeado por sus compañeros, junto con una amplia representación vecinal, el domingo 14 en la plaza de toros con un concierto solidario bajo el nombre ‘Bailare’ dentro del programa de Gijón Arena.
Serán 9 horas de música, desde las 12.30 hasta las 21.30, que se iniciarán con una declaración por parte de la organización. Habrá actuaciones en directo de Soul Fiends, Melu, Fusión Plástica DJ Set, Percusión Sergio Absolutt y Manu Molina, y hasta 30 DJs pincharán en su memoria, entre ellos los grandes de la escena asturiana: Gillu, DJVoo, Helios Amor, Delgado, Mónika Osmo, DJ Pupilas, David Dee, David Moreira, Álex Ohmios, DJ Enrique, Eulogio, Jairo Catelo, Felipe Dorado, MP5 Elektronische, Alonso, Alberto Palacios, Kike Reigada, Kresy, Chusso, David, Yayo, Nayo, Kika, Nino, XTFUNK2, Mr. Think, Kintano, Fran Quintana, Alejandro Ávila, Aida Blanco, David Mallada, Marcos Orús, Héctor Llamazares y Antón Arrieta. Todos participan de manera altruista.
Las entradas ya están a la venta a un precio de 20 euros y la totalidad de los beneficios irán para su familia. «El acto servirá para recordar a Eloy como un pionero y maestro para muchos, una pieza clave en el desarrollo de la escena de música de baile en Gijón. Su influencia y conocimiento marcaron a toda una generación de artistas y aficionados», apuntan desde la organización, que reclama más seguridad en las calles. «Reclamamos la noche como un espacio seguro para el desarrollo de actividades económicas legítimas y para el esparcimiento de las personas. Hechos como el que derivó en la muerte de nuestro amigo no deberían volver a ocurrir jamás», denuncian.
