PABLO GARCÍA, PRESIDENTE DE AJE ASTURIAS
«Me hubiera gustado mucho haber conocido al recientemente fallecido Carlos Rodríguez (Cafento), su vida es un ejemplo a seguir«
«Me saca de quicio que la gente sea conformista, y desgraciadamente hay muchas personas (risas)»
-¿A qué hora te levantas? 6:30h.
-¿Cuántos años tienes? 38
-Naciste y te criaste en… Oviedo, plaza de La Gesta
-¿A qué colegio fuiste? San Ignacio
-¿Qué estudiaste? Administración y Dirección de Empresas en la Universidad de Oviedo
-¿Qué desayunas? Zumo de naranja, avena con kéfir, nueces y arándanos. Es mi comida más sana del día (risas)
-¿Deporte? Voy al gimnasio, practico esquí, fútbol y golf.
-¿Triunfaste en alguno? En golf fui campeón de España de segunda categoría con 20 años, tenía buen nivel.
-¿En qué posición juegas en el campo de fútbol? Mediocentro, destruyo y creo, a lo Xabi Alonso, una posición denostada (risas)
-¿Estás siguiendo La Liga? La seguía más antes. Con todo esto de la pandemia lo he dejado de lado. Soy futbolero de siempre pero ya ves, se jugaba la final de la Copa del Rey el otro día y no lo sabía. Me preocupé.
-¿Tu equipo? Del Real Oviedo y del Real Madrid, pero siempre me alegro de que ganen los equipos asturianos.
-¿Las empresas asturianas pagan muchos impuestos? Las personas más que las empresas, sobre todo por sucesiones y patrimonios.
-El futuro de Asturias es… Incierto
-Una Comunidad referente en crear un entorno favorable para el emprendimiento. País Vasco
-Un país de referencia en emprendimiento. Estados Unidos
-¿Cuál es el mayor problema de Asturias hoy? El reto demográfico y el despoblamiento de la zona rural y del área metropolitana.
-¿Está bien visto ser empresario en España? No lo suficiente, hay mucho trabajo por hacer. Hay que reconocer la figura del empresario y dignificarla. Es el oficio más noble porque detrás de un empresario hay creación de puestos de trabajo. Los medios de comunicación tienen que ayudar.
-¿Qué es lo mejor de ser empresario? Levantarte los lunes y saber que lo haces para ti, saber que tu proyecto beneficia a muchas familias y a la sociedad en general, incluso también pagando impuestos. Es genial ser libre y hacer tu proyecto a tu imagen y semejanza, y luego la posibilidad de influir en el entorno cercano.
-¿Y lo peor? No tener casi un minuto de descanso y estar continuamente pensando en los retos, aunque forma parte del juego. Siempre me gusta ver el lado bueno.
-¿Y la soledad del empresario? Es uno de los mayores problemas. También depende del tipo de organización: empresa familiar, cooperativas etc. Asociaciones como AJE te ayudan también a sentirte arropado.
-¿Si no te hubieses dedicado a la formación y la empresa, que otra profesión te hubiera gustado ejercer? Algo que ayudara a los demás, como policía, o sanitario.
-¿Pedir perdón o pedir permiso? Hay que atreverse. La vida te va a mejor pidiendo perdón que permiso.
-Última serie que te haya gustado. Peaky Blinders
-Un libro. Estoy leyendo uno con bastante moraleja que me regaló Pablo Junceda, vicepresidente del Consejo Social de la Universidad de Oviedo. Se titula 2030: Viajando hacia el fin del mundo tal y como lo conocemos, de Mauro Guillén.
-Una canción que no te sacas de la cabeza. Cualquiera de Pica-Pica (grupo infantil). Como tengo tres peques…
-Teniendo en cuenta el contexto económico, Gijón es una ciudad… Muy dinámica.
-Gijón puede ser… Parte fundamental del área metropolitana.
-2 de cada 3 jóvenes asturianos renuncian a buscar trabajo, ¿por qué? En definitiva, hay mucha desazón. La sociedad está un poco anestesiada y hay una política de subsidios importante. Es una política desincentivadora del individuo.
-Si pudieras, ¿a dónde viajarías mañana? A una isla desierta en Maldivas.
-¿Te llevarías? Un buen libro, aunque no sé si sería capaz de desconectar.
-¿Cómo incentivar la natalidad en Asturias? Yo ya tengo 3 hijos, he cumplido (risas). Creo que hoy se piensan mucho las cosas. La gente joven planifica mucho. Si te lo piensas demasiado, se te echa el tiempo encima.
-Un personaje inspirador de la historia. Adolfo Suárez.
-¿Sidra, cerveza o vino? Sidra, cada una tiene su momento, pero soy sidrero.
-Escoge un restaurante: italiano, mexicano o chino. Italiano, probablemente pediría una pizza. Estuve un año de Erasmus en Palermo (Sicilia), y la comida italiana me entusiasma.
-¿Cómo fue esa experiencia siciliana? La idea con la que fui no tenía nada que ver con lo que vi allí. La primera imagen fue tres niños en una moto, el mayor de 14, el menor 6, con un caballo amarrado detrás, circulando por la calle principal de la ciudad. Parecía más África que Europa, pero a su vez es una cultura muy rica, digna de ver. Animo a todo el mundo a que se pase por allí. También es llamativa esa forma de vida que tienen en torno a la mafia, muy de «El Padrino».
-¿El mayor consejo que te dieron tus padres? El mayor consejo fue ser un buen ejemplo.
-Hoy en día, ¿es más difícil ser empresaria que empresario? Quiero pensar que no, pero la realidad es que, por mucho que hayan mejorado las cosas, predominan los hombres, y eso será por algo. Creo que el nivel de conciliación que hemos alcanzado garantiza unos mínimos para que una mujer que quiera llevar un proyecto empresarial no tenga ninguna desventaja.
-¿Qué te saca de quicio de la gente? Que sea conformista, y desgraciadamente hay muchas personas (risas).
-¿Tu talento oculto? Soy tranquilo y paciente, eso me ayuda a gestionar todos los proyectos personales y profesionales.
-Alguna persona que te gustase conocer. Me hubiera gustado mucho haber conocido al recientemente fallecido Carlos Rodríguez, consejero delegado de Cafento. He leído su historia y trayectoria empresarial y me ha impactado mucho. Su vida es un ejemplo a seguir. Creó un empresón de 500 trabajadores en Tineo, donde quiso mantener empleo, compró empresas, fue promotor de la Asociación Asturiana de Empresa Familiar… Al día siguiente de su fallecimiento vi una furgoneta de una de sus marcas por Gijón: «La vida sigue y no se detiene», pensé.
