El programa LaSexta Columna documentaba ayer el proceso que llevó a la creación de la comunidad de Castilla y León durante la Transición. «Los leoneses son mucho más afines con los asturianos, pero por razones políticas no sé de qué índole se metió a León en una autonomía que no quería, no quería estar», contaba para la cadena el escritor leonés Juan Pedro Aparicio.
Lo cierto es que hubo varias movilizaciones a favor de la autonomía de León en solitario. El portavoz de Unión del Pueblo Leonés (UPL) en el Ayuntamiento, Eduardo López Sendino, apunta al ministro Martín Villa como gran responsable: «Martín Villa venía de la dictadura y siguió siendo un dictador, su filosofía era formar una comunidad grande para contrapeso a vascos y catalanes y le importó muy poco los deseos de leoneses, solamente por interés político falaz».
«Somos la única región histórica de España que no es autonomía. Nos encontramos con un mapa autonómico con regiones que nunca han tenido una tradición histórica como pueden ser Cantabria, La Rioja, Murcia o Madrid y, sin embargo, son autonomía. ¿Por qué razón la región leonesa no es autonomía?»
Por su parte, el actual alcalde de León, José Antonio Díez, cuenta: «Se decidió hacer una comunidad central, con un voto conservador, y lo demuestra que en 40 años solo ha gobernado el PP, en eso sí lo hicieron bien, pero no ha sido contrapeso de nada, somos cada vez menos y pintamos menos en este país».
En la actualidad, el conocido como leonesismo defiende que la Constitución les ampara para no formar parte de Castilla y León. Se ha debatido el asunto en varios ayuntamientos de la provincia de León, con un respaldo de la mayoría de consistorios.