El Gobierno del Principado de Asturias acaba de dar luz verde al trámite ambiental pertinente para autorizar la nueva planta de reciclaje de Cogersa en Serín, prevista para procesar la bolsa de basura mezclada. El documento, publicado en la edición de hoy del Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA), incluye las exigencias en materia medioambiental del Ayuntamiento de Gijón, especificadas por medio de un informe presentado el pasado 13 de enero.
Control sobre las emisiones, ruidos, vertidos y fugas de residuos peligrosos
La administración de Ana González (PSOE) señala que la actuación es compatible con el planeamiento urbanístico, pero que debe incluir “las condiciones oportunas” para asegurar el cumplimiento de las ordenanzas municipales. Esto es:
- Respecto a las emisiones atmosféricas, Gijón pide que se justifiquen técnica y documentalmente, dada la singularidad del proyecto. Quieren saber, en concreto, cómo será la evacuación de aire para la instalación del secado de biofiltro mediante la ventilación forzada.
- En cuanto a los vertidos, el proyecto especifica que los efluentes verterán en el colector de Cogersa. En este punto, el Ayuntamiento indica que no se señala dónde acaba el colector, y por lo tanto, si se necesita autorización municipal o de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico (CHC). “En el caso de que el colector finalice en el sistema de saneamiento municipal, los parámetros de vertido de las aguas residuales se ajustarán a los límites indicados sobre vertidos de agua residuales industriales”, recoge el informe.
- Respecto al ruido, Gijón exige que se tomen las medidas de atenuación acústicas necesarias para cumplir la ley. Y sugiere que se empleen cerramientos para contener la maquinaria más ruidosa, minimizando de esa forma la emisión al exterior de la instalación.
- Por último, el Ayuntamiento pide a Cogersa que tome las medidas necesarias para que los residuos peligrosos producidos no produzcan lixiviados. Para ello, indica que deben almacenarse en estructuras techadas, impidiendo que la lluvia entre en contacto con estos residuos. También sugiere el empleo, en su caso, de depósitos de doble pared y contenedores apropiados que minimicen las posibles fugas.
La nueva planta de Cogersa, pendiente de la licencia de obras municipal
Cogersa prevé invertir en la nueva planta de tratamiento y valorización de la fracción mezclada 58 millones de euros. Una vez informada favorablemente la Autorización Ambiental Integrada (AAI), el siguiente paso será la obtención de la licencia del Ayuntamiento de Gijón para el inicio de las obras, que se prolongarán durante dos años, según los cálculos del Consorcio.