El presidente del Principado de Asturias, el socialista Adrián Barbón, ha afirmado este domingo que no va a admitir críticas a Asturias o se intente dañar la imagen de la región. Así, ha afirmado que no acepta que «gente que no hace política aquí, nos diga lo que tenemos que hacer».
El líder asturiano se ha posicionado así horas después de la visita que celebraron el portavoz de Vox en el Congreso, Iván Espinosa de los Monteros, y la presidenta de Vox Madrid, Rocio Monasterio, a la finca de Mestas de Con (Cangas de Onís) donde estaba previsto celebrar una novillada este domingo.
El evento taurino iba a celebrarse en una plaza de toros desmontable al lado del río Gueña, pero la Confederación Hidrográfica paralizó las obras y abrió expediente sancionador al responsable, ya que no solicitó autorización. Sin embargo, para el portavoz de Vox en el Congreso se trata de «una decisión ilegitima, ilegal e injusta».
Espinosa ha culpado al PSOE y a la «izquierda fanatizada» de la cancelación de la novillada, algo que ha considerado «un ataque a las personas que viven del campo y a la unidad de España». Además, ha llegado a afirmar que «ni siquiera en el País Vasco» han cancelado el evento, pero «en Asturias pesa más la ideología».
Horas después, en un apunte en Twitter recogido por Europa Press, el presidente asturiano ha indicado que admite toda crítica política y que cada partido defienda sus propuestas, «pero lo que no admito ni admitiré jamás es que se critique a Asturias, se trate de dañar su imagen o gente que no hace política aquí, nos diga lo que tenemos que hacer». «Asturias es dueña de su destino», ha sentenciado.