El técnico de Mieres llegó a un equipo que había perdido los seis partidos que había jugado. Desde su fichaje, el club ha dado la vuelta a la situación y la permanencia ya no es un sueño

Vicente Álvarez asumió un importante reto cuando llegó al Corinto Gijón Basket en el mes de octubre. El club, que se había marcado unos objetivos muy ambiciosos, no había empezado con buen pie la temporada. Seis derrotas en los seis primeros partidos eran una rémora importante para los gijoneses. Una situación que podía acabar siendo dramática.
Hoy la situación es muy diferente. Con Álvarez a los mandos, los asturianos han sumado 13 victorias y 10 derrotas. Un cambio de tendencia que el club ha valorado tan positivamente que le han ofrecido la renovación al técnico mierense para la próxima temporada. Vicente Álvarez, a pesar de su juventud, lleva su vida dedicada al baloncesto asturiano, primero como jugador de liga EBA y posteriormente desde los banquillos, formándose en el Colegio San Ignacio, hasta conseguir el ascenso a liga EBA del Equipo de 1ª Nacional del Colegio Ecole en la temporada 2016-2017, si bien ha desarrollado la mayor parte de su labor en el Club BMV202
Hoy la permanencia ya no es un lejano sueño. El club ha salido de la zona de descenso y una victoria en el partido final de la temporada aseguraría, sin depender de otros resultados, una temporada más en EBA. Por eso el fin de semana posterior a la Semana Santa se marca en el calendario del baloncesto gijonés como una final. En frente estará el Hereda Ávila, el día 23 a partir de las siete de la tarde, en el parquet de la Tejerona.
Bien merecido lo tiene!