Sus restos mortales fueron localizados por el perro de rescate a unos 200 metros de donde tenía su vehículo
Un equipo cinológico de la Unidad Canina de Rescate del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA), formado por dos guías y un perro, localizó ayer noche el cuerpo sin vida de un varón de 23 años desaparecido en Amieva. Sus restos mortales fueron localizados por el perro de rescate en un matorral, a unos 200 metros del lugar donde tenía su vehículo, un quad, en una zona conocida como La Visitancia.
Hasta el lugar también se desplazó el Grupo de Rescate, la Unidad de Drones y el jefe de zona del oriente de Bomberos el SEPA junto a dos agentes del Greim de la Guardia Civil. Vecinos del fallecido llevaban buscándolo desde esa misma tarde cuando se extrañaron de su ausencia tras subir, en torno a las 14.00 horas a ver el ganado.
El Centro de Coordinación de Emergencias del 112 Asturias recibió el aviso a las 19.35 horas. En la llamada, realizada por un vecino, indicaban que estaban buscando a un vecino que faltaba de su casa desde las dos de la tarde. Había subido a ver al ganado y creían que podía haberle pasado algo porque no había regresado a casa. La Sala 112 del SEPA movilizó a la Unidad Canina de Rescate y al Grupo de Rescate junto a la Unidad de Drones y el jefe de zona oriente. Además se informó a la Guardia Civil que activó al Greim de Cangas de Onís.
Una vez en el lugar el perro marcó la localización muy rápidamente. Tras recibir la correspondiente autorización los equipos portearon al fallecido hasta el lugar donde se habían movilizado los servicios fúnebres. Finalizada la intervención os equipos regresaron a sus respectivas bases.
