María Álvarez, conocida por su marca Mery Trendy, llegaba los 40 envuelta en una vaporosa y transparente capa verde, complementada con un sugerente vestido mini plateado
El primer fin de semana de noviembre, no solo fue especial porque ya huele a Navidad. Las luces ya están casi preparadas en todas las zonas de la ciudad, y aunque no somos tan exagerados como el consistorio de Vigo (era lo que nos faltaba), en cada esquina se imagina una lo que acontecerá, en cuanto a alumbrado, dentro de poco más de un mes.
Así y todo, hubo una zona de Gijón que resplandeció y brilló, en todo el sentido amplio de la palabra, porque tenía lugar un acontecimiento importante. El Tostaderu, local que toma el nombre de ese trocito de San Lorenzo en el que se turran vuelta y vuelta los cuerpos más calurosos y serranos de la villa, daba la bienvenida a los cuarenta años, de una de las caras más amables y conocidas tanto de redes sociales, como en su día, en televisión.
María Álvarez, ahora conocida por su marca Mery Trendy, llegaba a dicho número, envuelta en una vaporosa y transparente capa verde, complementada, como ella bien destacaría en sus comentarios, con un sugerente vestido mini plateado.
Su marido Víctor Menéndez no dejó nada en el aire para que su mujer disfrutara del momento rodeada de sus más íntimos. Así que al igual que en las galas que suele presentar, “la Trendy” se encontró con un photocall de su tamaño y todo el concurrido expectante, ataviados de negro o blanco, colores propuestos en la invitación.
No faltaron las diseñadoras que suelen vestirla en los eventos, Paola Santín y Cova Salinas, esta última de Marlis Atelier. Ni Silvia Caravaca y Mónica Dressme, desplazadas a la cita desde Avilés.
Influencers cómo Duquesita de Piñera, María 1975, Leticia Favv o Crisbylike, todas ellas con potentes cuentas en la red más vista, como es Instagram, tampoco faltaron a la cita.
Mientras, la homenajeada, micrófono en mano, iba presentando al concurrido “que nadie se sienta solo, ahora ya os ponéis todos cara” entre aplausos, destellos de luces y un humo que daba a la atmósfera un toque aún más chic. Un abrazo afectuoso, con Lourdes Rassims, directora de la agencia de modelos del mismo nombre, no pasó desapercibido, porque ese par de compañeras pasan mucho tiempo juntas.
No quedó en saco roto tampoco los aplausos de los amigos y amigas del gimnasio de Marcos Álvarez Energy Fit, donde la cumpleañera pasa bastante tiempo, cuidando su cuerpo.
Otro de los divertidos grupos que no quisieron perderse el festín ni los bailes, no dejaron la pista ni un minuto, fueron María Fra, Sorribas, Ramón Peña y Belén Flórez, esta última con un showroom en el local hostelero que acogió la fiesta.
Evidentemente no faltó la música del DJ Nancy, ni los cientos de fotografías que disparó Puxa Peón y ni siquiera el sorteo. Ahí la homenajeada hizo alarde de su poderío y micrófono en mano sorteó un lote de regalos interminable con la ayuda de “la mano inocente” de su marido que a lo largo de la noche volvió a sorprender a su querida compañera.
Una tarta gigante con noventa bombones personalizados con su marca profesional y fecha del evento, acompañada de bengalas de luz, sellaron la fecha tan inolvidable para la conocida y querida influencer y presentadora asturiana.
¡Ahora a por otros cuarenta!