El test de alcohol mostró una tasa de 0,34 mg/l en aire espirado, mientras que el test de drogas confirmó la presencia de cocaína

El triple combo: superando la velocidad admitida y bajo la presencia de alcohol y drogas. Así circulaba el pasado 15 de enero un vecino de El Franco cuando fue interceptado por la Guardia Civil. En concreto, iba a 190 kilómetros por hora en la autopista A-8, a su paso por el término municipal de Tapia de Casariego superando el límite en 70 km/h. Además, durante la intervención, los agentes realizaron pruebas de alcohol y drogas al conductor que resultaron positivas. El test de alcohol mostró una tasa de 0,34 mg/l en aire espirado, mientras que el test de drogas confirmó la presencia de cocaína.
Como resultado de estos hechos, la Guardia Civil formuló tres denuncias: una por exceso de velocidad, otra por superar la tasa permitida de alcohol y una tercera por conducir bajo los efectos de sustancias estupefacientes. El conductor se enfrenta a sanciones que podrían alcanzar los 2.000 euros y la pérdida de 16 puntos en su carné de conducir. Esta actuación se enmarca en los planes de vigilancia del Sector de Tráfico de Asturias, cuyo objetivo es garantizar la seguridad vial y prevenir comportamientos de riesgo en tramos de alta velocidad.