ENTREVISTA CON EL SECRETARIO GENERAL DE CIUDADANOS
PRINCIPADO: «Sabemos que en esta región hay muchos ciudadanos de centro liberal, convencidos de que no quieres decantarse ni por un extremo ideológico, ni por otro»
MANUEL IÑARRA: «‘Lolo’ representa al 100% el ADN de Ciudadanos. Su moderación, su capacidad de llegar a consensos, el no decir una palabra más alta que la otra… Entiende lo que es servir, y no servirse»
GOBIERNO: «Aunque PP y PSOE digan que vuelve el bipartidismo, no es así. Somos los que debemos aportar la dosis de sentido común, y salvar a España de que sea gobernada por extremistas y nacionalistas.»
Toda campaña electoral, ya abarque el ámbito municipal, autonómico o nacional, ofrece el campo de cultivo ideal para que germinen teorías de toda clase, más o menos realistas, descabelladas o divertidas. Y si hay una que se ha colado con intensidad en el imaginario de miles de españoles en los últimos meses, esa es la vaticinada debacle de Ciudadanos en los comicios que tendrán lugar el 28 de mayo. Estudios demoscópicos, valoraciones de politólogos, opiniones vertidas desde la barra de un bar… Los frentes desde los que parte ese ataque son muchos y variados, no siempre imbuidos de la debida credibilidad. Sin embargo, nada de todo eso perturba el ánimo de Adrián Vázquez Lázara (Madrid, 1982), secretario general del partido naranja desde el pasado 12 de enero. Curtido en los despachos y pasillos de entidades como la OSCE, la OTAN o, desde 2019, el Parlamento Europeo, este experto en Relaciones Internacionales encara con una mezcla de realismo empírico y pragmatismo arrollador, fruto de su ascendencia gallega, el reto que se presenta para su formación, escudado en la mejora de la intención de voto desde primeros de año y con una idea clara en mente: que Asturias, de un modo u otro, es un agente fundamental para el presente y el futuro del país. De todo ello diserta con MIGIJÓN desde la sede de la agrupación en Oviedo.
La de esta semana ha sido su segunda visita a Asturias desde que asumió la secretaría general. ¿Ha tenido oportunidad de tomarle el pulso al Principado?
Asturias es fundamental para Ciudadanos. Esa es una idea que ha de quedar clara desde el principio. Sabemos que en esta región hay muchos ciudadanos de centro liberal, convencidos de que no quieres decantarse ni por un extremo ideológico, ni por otro. Por eso, para nuestra formación las perspectivas electorales son muy buenas, y no dudo de que Manuel ‘Lolo’ Iñarra tendrá la posibilidad de formar parte del futuro gobierno asturiano.
¿En qué se basa para creerlo?
A día de hoy vemos que todas las encuestas nos sitúan muy cerca del 3% de los votos, y entrar en la circunscripción central con ese margen, en un abanico tan volátil y polarizado, demuestra que ese escaño que obtendrá Iñarra, que talvez sean dos o tres, van a ser determinantes para decidir el futuro gobierno. Además, lo que intentamos es construir esas mayorías en un espacio en el que ya no existen las mayorías absolutas. Así las cosas, no puede haber gobiernos sin contar con las extremas derechas y izquierdas. Por eso, si Ciudadanos es decisivo en el Principado o en los Ayuntamientos, podremos construir esa mayorías que posibiliten los gobiernos desde el centro hacia los extremos, y no al revés.
«El PSOE y el PP hablan mucho de reindustrialización; eso son políticas del siglo XX. Asturias necesita reformar por completo su modelo económico, a través de la digitalización, el fomento del emprendimiento y, sobre todo, el freno a la fuga de talentos»
Ha mencionado antes que Asturias es fundamental para ustedes. ¿De qué modo?
Aquí Ciudadanos ha sido fuerte siempre, y llevamos cuarenta años con el mismo gobierno, que está absolutamente agotado. Por poner un ejemplo, vemos que el PP ha traído a un señor de Bruselas, Diego Canga, que, sin embargo, carece de un conocimiento profundo de la región. Lo que nosotros queremos es una reforma profunda del Principado, porque con los datos actuales nos llevamos las manos a la cabeza. La peor tasa de natalidad de toda Europa la tiene Asturias, y si queremos que sea viable social y económicamente, tenemos que revertir esa situación. Por eso nos centramos en las familias y en la gente asalariada, en todos aquellos que sostienen el estado del bienestar, pero que no reciben bienestar a cambio. Y lo hacemos proponiendo un horario flexible, políticas de fomento de la natalidad, que la Seguridad Social cubra los tratamientos de fertilidad, mejorando la conciliación familiar y el acceso a la primera vivienda… En suma, nos centramos en esos ciudadanos que están cansados de la pelea mediática de un lado a otro, y que lo que quieren es sentido común.
Desde su posición como secretario general nacional, ¿cómo encaja Asturias en el puzle del futuro del país? Sobre todo, a tenor de las crecientes voces que hablan del posible fin de su potencial industrial…
Eso es algo que he escuchado mucho en boca del PP y del PSOE; hablan mucho de la reindustrialización, pero eso son políticas del siglo XX. Tenemos que reformar completamente nuestro modelo económico, buscar nuevas maneras de ser productivos. La digitalización es una de ellas. No sólo es algo que vemos a menudo en los medios de comunicación; el futuro económico de muchos países pasa por ello. Y también nos encontramos la necesidad de fomentar el emprendimiento, que es una de las grandes necesidades de Asturias; sobre todo, para detener la fuga de talento. Cada día emigran once asturianos fuera de la región, y eso es porque no pueden desarrollar una vida familiar y profesional plena. En Ciudadanos entendemos que el 3% del PIB tiene que ir a políticas de innovación y emprendimiento. Si no, estamos avocados a tener un país de viejos, y para mantener el estado del bienestar necesitamos jóvenes e hijos, y profesiones que generen un valor añadido. Si no, acabaremos por enfrentarnos a un grandísimo problema demográfico.
¿Y cree que Iñarra aglutina los elementos necesarios para liderar ese cambio en el Principado?
‘Lolo’ representa al 100% lo que es el ADN de Ciudadanos. Su moderación, su capacidad de llegar a consensos, el no decir una palabra más alta que la otra… Es un candidato que entiende que ha venido a servir, no a servirse. Además es profesor, pero no uno cualquiera; ha decidido centrar su labor profesional en el sector rural, uno de los grandes abandonados de Asturias y de muchas partes de España. Tiene claro lo que significa la educación, la importancia del deporte… Entiende que la educación es el futuro, que los niños también, que a la educación hay que ayudarla… Y en un contexto en el que parece que en Asturias no se pueden tener niños, porque las política no motivan, él está centrado en que esas familias puedan tener una vida completamente plena.
Iñarra ha sido muy crítico con la inclusión en la lista autonómica del PP de José Luis Costillas y Manuel Cifuentes, dos tránsfugas de Ciudadanos… Y no es la primera vez que algo así sucede en su partido.
Sí, es algo a lo que yo veo como un caso de ‘corrupción institucional’. Dicho esto, la gente que ahora no está con nosotros, y que ha decidido ir a otro partido, está donde mejor está, que es lejos del proyecto liberal que representa Ciudadanos. Y en cuanto a los que han acabado en las filas del PP… Bueno. El PP ha demostrado ser un partido que lleva la corrupción en su ADN. Y ya lo reza el dicho: «Dios los cría, ellos se juntan».
Ampliando el foco al conjunto del país, ¿en qué situación se halla Ciudadanos de cara a los comicios del 28 de mayo?
Desde enero estamos infinitamente mejor, y muy contentos de todo lo que hemos construido en este tiempo, con perspectivas mucho mejores. Hemos presentado 800 listas en todo el país, por lo que el 80% de la población podrá elegir la papeleta naranja. Por supuesto, ha sido el resultado de un trabajo ingente. A partir de ahí, nuestro objetivo no es ocupar el poder sólo por ocuparlo, sino cambiar las vidas de los españoles. Respecto a mayo, sabemos que no será mejor que 2019, pero sí más consistente. El nuevo Ciudadanos tiene muy caro cuál es el centro político, que siempre pactará respecto a su programa, y que trazará dos líneas rojas: no negociamos ni con populistas, ni con nacionalistas. En base a eso nos dirigimos a las familias, a esa clase media exprimida, y no necesitamos un resultado grande para obtener un gran resultado. Nos centramos en ser decisivos allá donde entremos, y el partido va a estar en todo el ciclo electoral.
Pese a ello, los sondeos auguran un resultado poco halagüeño. ¿Cree que podría haber sorpresas de última hora?
Creo que el Ciudadanos de ahora es distinto del de sus inicios. Aquello fue una ola que generó mucha ilusión. Ahora somos realistas, no somos un partido del 15% del voto, sino un partido que decide gobiernos desde el sentido común. Ojo, hemos notado que desde enero hemos triplicado nuestra intención de voto. Queremos que nuestras p`ropuestas los sean para mejorar vidas. Sé que puede parecer ‘naif’, pero en eso es en lo que creemos, y el objetivo son las clases medias, que no están representadas. Y creo que lo estamos consiguiendo. N nos hacemos trampas al solitario; sabemos que el 28 de mayo será complicado, pero donde se logre se marcará ese paso. El giro se nota poco a poco, y una vez dentro del gobierno se notará aún más.
Usted accedió a la secretaría general a mediados de enero. Internamente, ¿cómo encontró el grupo en aquel momento?
Estábamos en una situación compleja, eso no es noticia para nadie. Se seguía trabajando en base a como se trabajaba en los años anteriores, sólo que la realidad había cambiado radicalmente. Lo que hemos hecho es readaptar esa estructura y esas políticas a lo que quiere la gente. Ha sido un cambio profundo, pero en seis semanas le hemos dado la vuelta al partido. Incluso se ha notado en el perfil de los candidatos, y estamos contentos de lo logrado. Siendo totalmente sincero, no se habría podido hacer más en menos tiempo, de modo que el análisis general es positivo.
«Somos el mirlo blanco de Europa, porque en el sur nunca hubo una fuerza liberal fuerte hasta que llegamos. Y también somos el partido que más ha contribuido a la construcción del centro»
Su trayectoria política bebe directamente del ámbito internacional. ¿Cuál es la percepción que en Europa tienen de Ciudadanos?
De entrada, somos el segundo partido liberal más grande en el Parlamento Europeo, y cabe recordar que somos el mirlo blanco, porque en el sur del continente nunca hubo una fuerza liberal fuerte hasta que llegamos. Es verdad que ahora en otros países, con los grupos conservadores en manos de la extrema derecha, y con las izquierdas sin saber lo que son, muchos partidos liberales sufren esa polarización, pero podría decir que somos de los partidos, si no el partido, que más han influido en la construcción del espacio liberal en estos años. Sin ir más lejos, tenemos una relación excelente con el partido de Emmanuel Macron, que también han hecho una refundación. Eso es lo que representa Ciudadanos.
Y eso que no escasean los gurús que anuncian el retorno de los bipartidismos.
El PSOE y el PP están en caída libre desde hace quince años. Y, aunque quieran vender que el bipartidismo vuelve, no está siendo así. Los suyos son proyectos que sentimos que están decapitalizados; es la razón por la que cualquiera de ellos tiene que lanzarse en brazos de uno u otro extremo. En cambio, nosotros tenemos claro que somos los que debemos aportar la dosis de sentido común y, de alguna manera, salvar a España de que sea gobernada por extremistas y nacionalistas.
Es una pregunta obligada, a tenor de la situación actual del partido… ¿Teme que, si su percepción se revela equivocada, pueda llegar a desaparecer?
Precisamente hemos cogido el partido para que eso no suceda. Tenemos un plan, pensamos que estamos recuperando la confianza de muchos españoles y, al final, serán ellos quienes decidan si quieren tener un partido de centro, que represente a esas familias, o no. Nos debemos al ciudadano, y no olvidemos el aspecto más importante de esta cuestión: que, al final, cuando vota, siempre tiene razón.