Separar estos residuos en casa es una forma sencilla y eficaz de mejorar las cifras de reciclaje, que actualmente se sitúan en un 36,2%, lejos del 50% exigido por la Unión Europea
El Ayuntamiento de Gijón/Xixón, junto a EMULSA y en colaboración con Cogersa, ha intensificado su campaña de reciclaje de residuos orgánicos para cumplir con las exigencias europeas y reducir la cantidad de basura que acaba en el vertedero de Serín. Actualmente, el 90% de la basura mezclada que se tira al contenedor contiene residuos que podrían ser reciclados si se separaran adecuadamente.
En Gijón/Xixón ya hay instalados 1.400 contenedores marrones, destinados exclusivamente a los residuos orgánicos. Estos desechos, una vez recogidos, se transforman en compost y biogás en la planta de Cogersa, contribuyendo así a generar electricidad y abonos naturales.
Entre los residuos orgánicos que deben ir al contenedor marrón se encuentran:
- Restos de frutas y verduras.
- Cáscaras de huevo, frutos secos y marisco.
- Restos de carne y pescado.
- Posos de café y restos de infusiones.
- Restos de comida cocinada, pan y bollería.
- Tapones de corcho, serrín, cerillas, servilletas y manteles usados.
Separar estos residuos en casa es una forma sencilla y eficaz de mejorar las cifras de reciclaje, que actualmente se sitúan en un 36,2%, lejos del 50% exigido por la Unión Europea.
Para abrir los contenedores marrones es necesario utilizar la tarjeta ciudadana, un sistema que facilita el acceso y asegura un buen uso. Además, los contenedores grises, que sustituyen a los antiguos contenedores verdes, están destinados a los residuos no reciclables.
Gracias a la separación de residuos orgánicos:
- Se reduce el volumen de basura que acaba en el vertedero.
- Se transforma la materia orgánica en energía y compost.
- Se avanza hacia los objetivos europeos de sostenibilidad y reciclaje.
Gijón/Xixón cuenta ya con más de 250.000 vecinos que tienen acceso a los contenedores marrones. La colaboración ciudadana es fundamental para garantizar el éxito de esta campaña y convertir la ciudad en un referente de reciclaje y sostenibilidad en Asturias.
Yo soy de los que reciclo todo lo que puedo, pero considero que las autoridades poco hacen para incentivar el reciclaje. Cuestion aparte, no puede ser que todos los gastos recaigan en los ciudadanos y que a las empresas no se les prohiban o sancionen ciertas practicas a la hora de producir plasticos y sobreembalajes innecesarios.