La asturiana vivió este domingo el esperado reencuentro con el torero, con el que lleva más de dos décadas casada
Y el esperado momento llegó. Tras varias semanas de concurso, en las que la asturiana Arantxa del Sol ha sufrido, reído y peleado como nadie, este domingo ‘Supervivientes‘ tenía guardada para ella la mejor de las sorpresas, la visita de su pareja, Finito de Córdoba. El encuentro se producía después de que el torero superase una prueba y consiguiera las llaves que abrían la celda donde permanecía Arantxa. Ella, con los ojos vendados, se fundía en un apasionado abrazo tras descubrir que su liberador era también su marido, con el que lleva más de dos décadas de matrimonio.
Entre lágrimas, ambos expresaron su felicidad por el reencuentro, siendo recibidos entre palabras de ánimo por parte de Sandra Barneda y el resto de sus compañeros. El torero elogió el desempeño de Arantxa en el concurso y le dedicó varias palabras apasionadas. De ella dijo, entre otras, que «ni el hambre te roba la belleza». Tras conocer la buena noticia de la salvación de Arantxa una semana más en la expulsión, la pareja pudo disfrutar además de una noche juntos en Honduras. Desde el plató, la hija de la pareja, Lucía, compartía su emoción y contenía las lágrimas al presenciar el bonito reencuentro.