La educación pública asturiana vive hoy su primera jornada de huelga convocada por los sindicatos CCOO, UGT y Suatea, y, paralelamente, CSIF, tras no alcanzar un acuerdo con la Consejería de Educación en la última ronda de negociaciones celebrada este lunes

La educación pública asturiana vive hoy su primera jornada de huelga convocada por los sindicatos CCOO, UGT y Suatea, y, paralelamente, CSIF, tras no alcanzar un acuerdo con la Consejería de Educación en la última ronda de negociaciones celebrada este lunes. La movilización de los tres primeros afecta a los docentes de Infantil y Primaria, y se acompaña de una concentración prevista a las 18:00 horas en la plaza de España de Oviedo. A la protesta se suma también el sindicato CSIF, que ha convocado un paro indefinido para todos los cuerpos docentes, incluidos Secundaria y Formación Profesional, con un calendario de huelga de cuatro días por semana. El sindicato ha organizado su propia concentración este martes a las 12:00 horas también en plaza España, en Oviedo.
Las organizaciones sindicales mayoritarias han manifestado su “profunda decepción” con el resultado del encuentro mantenido este lunes con la consejera de Educación, Lydia Espina. Según sus portavoces, las propuestas del Gobierno regional carecen de concreción en aspectos fundamentales como la jornada reducida en junio y septiembre, la homologación salarial con otras comunidades autónomas, la aplicación de la LOMLOE o la mejora de las plantillas. Acusan a la Consejería de “vivir al margen de la realidad” de los centros educativos.
Desde la administración educativa, Espina ha defendido su disposición al diálogo y ha presentado una serie de propuestas que incluyen la posibilidad de que los consejos escolares decidan sobre el uso del tiempo lectivo en junio y septiembre, la asunción directa por parte de la Consejería de la gestión económica de los centros, y la reforma del sistema de evaluación docente. Entre las medidas planteadas también se contempla la inclusión de bajas médicas de larga duración en los tramos evaluables y posibles complementos retributivos para quienes no hayan accedido al plan de evaluación en sus primeros años de ejercicio.
Por su parte, el sindicato ANPE, que mantuvo su reunión con la Consejería antes que el resto de organizaciones, valoró positivamente la voluntad de diálogo mostrada por Espina, aunque ha decidido mantener sus paros parciales previstos a partir del 9 de junio al considerar que persisten cuestiones aún sin resolver, como la reducción de burocracia o el refuerzo de recursos en los centros.